6 de agosto de 2022
Todas Las Fuerzas Del Infierno
2
Corintios 1:1-24
En la primera carta de Corintios, Pablo tuvo
que corregir una gran variedad de errores.
Unos estaban negando la realidad de la resurrección. Otros estaban cayendo
en sus diferentes grupos, siguiendo diferentes predicadores.
Uno estaba aun en una relación incestuosa con
la mujer de su Padre.
Otros abusaban la mesa de la santa cena,
tomando la cena de manera indigna, y cayendo bajo las consecuencias.
Pero en esta segunda carta, será aun mas
difícil para San Pablo, porque ahora, mas y mas, tiene todas la fuerzas del
infierno en su contra.
1-2) Pablo, apóstol de Jesucristo por la
voluntad de Dios, y el hermano Timoteo, a la iglesia de Dios que está en
Corinto, con todos los santos que están en toda Acaya: Gracia y paz a vosotros,
de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.
Es un saludo normal para Pablo, pausa,
pero empieza declarando que era apóstol, no por su propia voluntad, sino por la
voluntad de Dios.
Es que en esta carta, Pablo tendrá que
defender su autoridad como apóstol, porque unos falsos, llamados súper
apóstoles, vinieron de Jerusalén, tratando de establecer se en Corinto, hablando
mal de Pablo.
2 Corintios 11:4-5 Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el
que os hemos predicado, o si recibís otro
espíritu que el que habéis recibido, u otro evangelio que el que habéis
aceptado, bien lo toleráis; y pienso que en nada he sido inferior a aquellos
grandes apóstoles.
En otras traducciones dice súper apóstoles,
aquí dice grandes apóstoles, pero eran unos que reamente ni merecían el nombre
de apóstol. Es que estaban trayendo
doctrinas distorsionadas.
Se buscaban muchas maneras de atacar a San
Pablo, pero una era por sus sufrimientos.
En el libro de Job, el gran hermano sufría mucho, aunque era un hombre
justo. Sabemos que Bíblicamente esto
puede pasar.
Pero los adversarios de Pablo dijeron que
algo estaba mal con Pablo porque tenia muchos sufrimientos, mientras ellos
vivían su mejor vida ahora.
Pablo sufría por dos razones. Se avanzaba el reino de Dios muy
agresivamente, y por esto tenia todas las fuerzas del infierno en su
contra.
Y Dios permitía una cantidad de sufrimientos
para mantener lo en la humildad. No es
siempre fácil mantener se humilde cuando eres muy, pero muy talentoso, y eficaz
en la obra.
2 Corintios 12:7-10 Y para que la grandeza de las revelaciones no me
exaltase desmedidamente, me fue dado un
aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me
enaltezca sobremanera; respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo
quite de mí. Y me ha dicho: Bástate mi gracia;
porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me
gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de
Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas,
en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil,
entonces soy fuerte.
Sus oponentes no sufrieron tanto, porque ni
estaban sirviendo a Dios, sino al enemigo.
3-4) Bendito sea el Dios y Padre de nuestro
Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual
nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros
consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación
con que nosotros somos consolados por Dios.
Aquí, como parte de su defensa, Pablo hablaba
mucho de la consolación. Pablo reconocía
sus sufrimientos, pero dice que Dios estaba siempre a su lado ayudando le con
la consolación misericordiosa.
Dice también que tus tribulaciones, que todos
nosotros podemos sufrir de una forma u otra, que estas tribulaciones nos dejarán
calificados a ayudar, a consolar a otros, siempre y cuando sufrimos sirviendo a
Cristo, y no a la carne.
5) Porque de la manera que abundan en
nosotros las aflicciones de Cristo, así abunda también por el mismo Cristo
nuestra consolación.
Los que sufren mucho, sirviendo a Cristo, van
a tener una abundancia de consolación, haciendo sus vidas soportables, hasta
alegres.
San Pedro también hablaba de las aflicciones,
y de su gran propósito, pero siempre son las aflicciones por caminar con
Cristo.
1 Pedro 4:12-16 Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os
ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña
os aconteciese, sino gozaos por cuanto
sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la
revelación de su gloria os gocéis con gran alegría.
Si sois vituperados por el nombre de Cristo,
sois bienaventurados, porque el glorioso Espíritu de Dios reposa sobre
vosotros. Ciertamente, de parte de ellos, él es blasfemado, pero por vosotros
es glorificado. Así que, ninguno de
vosotros padezca como homicida, o ladrón, o malhechor, o por entremeterse en lo
ajeno; pero si alguno padece como cristiano,
no se avergüence, sino glorifique a Dios por ello.
Esto es el tema, mas o menos del mensaje de
hoy.
6) Pero si somos atribulados, es para vuestra
consolación y salvación; o si somos consolados, es para vuestra consolación y
salvación, la cual se opera en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros
también padecemos.
Las aflicciones tienen su buen propósito,
porque a los que aman a Dios, todos las cosas les ayudan a bien.
7) Y nuestra esperanza respecto de vosotros
es firme, pues sabemos que así como sois compañeros en las aflicciones, también
lo sois en la consolación.
Pablo tenia una gran confianza en la mayoría
de los hermanos en Corinto. Pero también, allá, había una minoría que estaba en
su contra. Y de ellos, vamos a escuchar
mucho en esta segunda carta.
8) Porque hermanos, no queremos que ignoréis
acerca de nuestra tribulación que nos sobrevino en Asia; pues fuimos abrumados
sobremanera más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que aun perdimos la
esperanza de conservar la vida.
Pablo estaba atacado en todos lados. Un ejemplo de la manera en que la gente
reaccionaron al evangelio estaba en…
Hechos 17:6-8 Pero
no hallándolos, trajeron a Jasón y a algunos hermanos
ante las autoridades de la ciudad, gritando:
Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá; a los cuales Jasón
ha recibido; y todos estos contravienen los decretos de César, diciendo que hay
otro rey, Jesús. Y alborotaron al pueblo
y a las autoridades de la ciudad, oyendo estas cosas.
Esto era como los Judíos delante de Pilato…
Juan 19:15 Pero
ellos gritaron: ¡Fuera, fuera, crucifícale! Pilato les
dijo: ¿A vuestro Rey he de crucificar?
Respondieron los principales sacerdotes: No tenemos más rey que César.
Los judíos incrédulos entendieron muy bien
cómo usar a Roma, en contra de la iglesia.
Y normalmente San Pablo era el blanco de sus
ataques, en el libro de Hechos.
8) Porque hermanos, no queremos que ignoréis
acerca de nuestra tribulación que nos sobrevino en Asia; pues fuimos abrumados
sobremanera más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que aun perdimos
la esperanza de conservar la vida.
Hay un dicho moderno en la fe Cristiana, en
que se dicen que Dios no te dará mas de lo que te puedes soportar.
Bueno esto es la verdad en términos de las
tentaciones. Pero en cuanto a las tribulaciones,
Pablo dice aquí que eran mas allá de sus fuerzas.
Y hay una razón por esto.
9) Pero tuvimos en nosotros mismos sentencia
de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios que
resucita a los muertos;
A veces las pruebas son muy severas, forzando
nos a confiar en Dios, y no en nuestra propia capacidad de manejar las cosas.
9-11) Pero tuvimos en nosotros mismos
sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios
que resucita a los muertos;
el cual nos libró, y nos libra, y en quien
esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte; cooperando también vosotros
a favor nuestro con la oración, para que por muchas personas sean dadas gracias
a favor nuestro por el don concedido a nosotros por medio de muchos.
Pablo sufría por Cristo, y por su
iglesia. Pero todo valía la pena. Y en medio de todo, Cristo estaba a su lado.
Mira como que Cristo estaba con Pablo,
plantando la iglesia en Corinto.
Hechos 18:9-10 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche:
No temas, sino habla, y no calles; porque yo
estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo
tengo mucho pueblo en esta ciudad.
Cuando Cristo está a tu lado, los
sufrimientos están soportables, aun cuando son muy grandes.
12) Porque nuestra gloria es esta: el
testimonio de nuestra conciencia, que con sencillez y sinceridad de Dios, no
con sabiduría humana, sino con la gracia de Dios, nos hemos conducido en el
mundo, y mucho más con vosotros.
Esta otra vez es una defensa, en contra de
los detractores de Pablo.
Pablo sufría si, no era como muchos modernos
que dicen que tienen que vivir su mejor vida ahora. Pero Pablo tenia su conciencia completamente
limpia, porque no estaba sirviendo a si mismo, sino al Señor. Y no sufría como uno que era castigado, sino
por un proceso de la purificación.
13-14) Porque no os escribimos otras cosas de
las que leéis, o también entendéis; y espero que hasta el fin las entenderéis;
como también en parte habéis entendido que somos vuestra gloria, así como
también vosotros la nuestra, para el día del Señor Jesús.
Esto está enfatizando la relación preciosa,
que existía entre Pablo, y los miembros de esa iglesia. Esa relación era lo que los apóstoles falsos
deseaban destruir, con sus infamias.
15-16) Con esta confianza quise ir primero a
vosotros, para que tuvieseis una segunda gracia, y por vosotros pasar a
Macedonia, y desde Macedonia venir otra vez a vosotros, y ser encaminado por
vosotros a Judea.
Esta es otra defensa. Es que Pablo dijo que iba a venir otra vez a
ellos, pero aun no ha venido. Y por
esto, sus detractores dijeron que Pablo no era nada confiable. Dijeron que Pablo hacia muchas promesas
vacías, que ni estaba pensando en cumplir.
Bueno, su visita sí era demorada, pero no
estaba cancelada. Muchos creen que Pablo
estaba dándoles tiempo de arrepentir se, y empezar a hacer los cambios
necesarios, pero sus detractores aprovecharon de esto para atacar su
carácter. Y por supuesto, su detractores
tenían todas las fuerzas del infierno a su lado.
17) Así que, al proponerme esto, ¿usé quizá
de ligereza? ¿O lo que pienso hacer, lo pienso según la carne, para que haya en
mí Sí y No?
Esto aun está contestando a las
acusaciones. Sus detractores dijeron
algo como “¡Mira, ese no es un hombre serio! Dice que va a venir, pero su si,
es si y no, al mismo tiempo, o tal vez.
No podemos confiar en este payaso!”
18) Mas, como Dios es fiel, nuestra palabra a
vosotros no es Sí y No.
Pablo estaba viviendo en el Espíritu de Dios,
no en la carne. Y cuando uno anda
sirviendo a Dios, pausa, Dios mismo puede cambiar nuestros planes.
19-20) Porque el Hijo de Dios, Jesucristo,
que entre vosotros ha sido predicado por nosotros, por mí, Silvano y Timoteo,
no ha sido Sí y No; mas ha sido Sí en él; porque todas las promesas de Dios son
en él Sí, y en él Amén, por medio de nosotros, para la gloria de Dios.
Es por esto, San Pablo gastaba tanto tiempo,
defendiendo a si mismo. Si se pudiera
derrumbar a Pablo, se pudiera derrumbar el Cristo que Pablo predicaba, para
poner en su lugar, otro Cristo, un cristo falso.
Pero en Cristo, todas las promesas son sí y
amen. No hay nada dudable en la
salvación de Cristo, y por esto estaremos celebrando su Santa Cena en unos
momentos.
Es interesante que en estos momentos hay otra
guerra irrumpiendo en el medio oriente, entre Israel y los palestinos. Pero mientras los judíos allí rechazan a Cristo,
hay poca esperanza para la paz.
Las promesas para los judíos, como para todos
son sí, y amen, pero solamente en Cristo Jesús.
Rechazando a Cristo no hay promesa alguna.
21-22) Y el que nos confirma con vosotros en
Cristo, y el que nos ungió, es Dios, el cual también nos ha sellado, y nos ha
dado las arras del Espíritu en nuestros corazones.
En las bodas latinas, las arras pueden ser
parte de la ceremonia.
Pero aquí, El Espíritu Santo, en nuestras
vidas, es como las arras, un pago de antemano, comprobando que nosotros ya estamos
en rumbo a la gloria.
23) Mas yo invoco a Dios por testigo sobre mi
alma, que por ser indulgente con vosotros no he pasado todavía a Corinto.
En esto, Pablo estaba invocando al nombre de
Dios, en un juramento, sobre la razón de que no ha regresado aun a
Corinto. Dice que ha sido indulgente,
¿pero en que sentido?
Pablo no deseaba estar peleando siempre con
ellos. Ya le expuso los cambios que
ellos tenían que hacer, y estaba dando les tiempo.
Vimos en la primera carta…
1 Corintios 4:19-21 Pero iré pronto a vosotros, si el Señor quiere, y
conoceré, no las palabras, sino el poder de
los que andan envanecidos. Porque el
reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder. ¿Qué queréis? ¿Iré a
vosotros con vara, o con amor y espíritu de mansedumbre?
Es que los hermanos en Corinto tenían que
cambiar, tenían que regresar a su primero amor, y no vivir mas en la
carne. Pero Pablo con mucha oración,
estaba dando les tiempo, y en este sentido era indulgente, pero jamás estaba
cancelando sus promesas.
24) No que nos enseñoreemos de vuestra fe,
sino que colaboramos para vuestro gozo; porque por la fe estáis firmes.
Los lideres de las iglesias no estamos aquí
para controlar todos los aspectos de las vidas de los miembros. Estamos aquí para ayudar, para colaborar,
pero no para enseñorear sobre tu fe.
Cada hermano es responsable por su propio
progreso, y nosotros estamos orando por tu máximo éxito. Pero tu fe es tuya, y no podemos forzar a
nadie a creer, ni a progresar.
*------------------------------- Conclusión
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Ahora, preparando por la Santa Cena, había un
poco de doctrina de Cristo en este capitulo.
Todas las promesas son sí y amen en
Cristo. Esto quiere decir que la
palabra, las promesas de Cristo son cien por ciento confiables.
Dios ha mantenido su Palabra ya por dos mil
años, siguiendo la muerte y la resurrección de Cristo. Y lo tenemos en muchos idiomas.
Tu puedes confiar en que por la fe en Cristo,
y por un arrepentimiento sincero, estás bien con Dios, y tus pecados, por mas
feos que sean, están perdonados en Cristo Jesús.
Y esto es lo que queremos celebrar ya, después
de una oportunidad de orar.
Como vimos en la primera carta…
1 Corintios 11:27-32 De manera que cualquiera que comiere este pan o
bebiere esta copa del Señor
indignamente, será
culpado del cuerpo y de la sangre del Señor.
Por tanto, pruébese cada uno a sí mismo, y coma así del pan, y beba de la
copa. Porque el que come y bebe
indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí.
Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos
duermen. Si, pues, nos examinásemos a
nosotros mismos, no seríamos juzgados; mas siendo juzgados, somos castigados
por el Señor, para que no seamos condenados con el mundo.
Vamos a Orar