17 de abril de 2022
El Pretexto Fatal
Marcos
3:1-35
Muchos en estos momentos están hablando de la
tumba vacía, y la realidad de la resurrección de Cristo Jesús. Y estas, por supuesto, son doctrinas
verídicas y muy queridas.
Pero nosotros acabamos de tomar dos semanas
estudiando la resurrección, terminando el libro del primero de Corintios, y
estaremos pasando por todos los detalles otra vez en este libro corto de Marcos,
en poco tiempo.
Así que, en esta mañana, vamos a simplemente
continuar predicando el evangelio, como hemos hecho, aquí en el libro de
Marcos, ahora en el capitulo tres.
1) Otra vez entró Jesús en la sinagoga; y
había allí un hombre que tenía seca una mano.
Cristo siempre quería mostrar su misericordia
a los menos afortunados. Y ese hombre
con su mano muy dañada no pudo trabajar.
Y en aquel entonces, no pudo tampoco encontrar grandes ayudas del
gobierno, como en este país.
2) Y le acechaban para ver si en el día de
reposo le sanaría, a fin de poder acusarle.
Había siempre unos religiosos, hipócritas,
siguiendo a Cristo tratando de encontrar razones de acusar le. Es que sabían que Cristo ya era bastante
popular, y que se mostraba grandes poderes, en todos lados. Estos hipócritas, no querían arrepentir se de
su inmoralidad, o de su idolatría, y por lo tanto, siempre buscaban pretextos
por no venir a la fe.
3) Entonces dijo al hombre que tenía la mano
seca: Levántate y ponte en medio.
El hombre con la mano dañada, ni pedía una
sanidad, pero Cristo estaba tomando la ofensiva, en contra de los malvados
religiosos.
4) Y les dijo: ¿Es lícito en los días de
reposo hacer bien, o hacer mal; salvar la vida, o quitarla? Pero ellos
callaban.
Ellos callaban porque ellos sabían que Cristo
deseaba salvar la vida de este hombre, y las almas de todos los que estaban
observando la drama del momento.
Pero ellos, los hipócritas estaban buscando
la manera de matar a Cristo, porque Cristo no honraba a sus tradiciones, sino
que les mostraba que no estaban conformes a la Santa Ley de Dios.
5) Entonces, mirándolos alrededor con enojo,
entristecido por la dureza de sus corazones, dijo al hombre: Extiende tu mano.
Y él la extendió, y la mano le fue restaurada sana.
Cristo estaba enojado, y triste a la
vez. Es que los que buscaban a sus pretextos
para rechazar la verdad, tenían sus corazones endurecidos. Por esto dice varias veces en el libro de
Hebreos.
Hebreos 3:15 Si
oyereis hoy su voz,
No
endurezcáis vuestros corazones.
5) Entonces, mirándolos alrededor con enojo,
entristecido por la dureza de sus corazones, dijo al hombre: Extiende tu mano.
Y él la extendió, y la mano le fue restaurada sana.
Cristo estaba enojado, y el enojo en si no es
un pecado, pero puede ser peligroso para los que andan en la carne, controlados
por sus pasiones carnales. Por esto San
Pablo dijo en…
Efesios 4:26-27 Airaos, pero no pequéis;
no se ponga el sol sobre
vuestro enojo
ni deis lugar al diablo.
Si una pareja, no puede resolver su
contienda, el mismo día, antes de ir a la cama, pausa, arrastrando el
asunto a otro día, pausa, se pueden dar un lugar, o sea una pista al
diablo, para traer mas destrucción a la familia.
5) Entonces, mirándolos alrededor con enojo,
entristecido por la dureza de sus corazones, dijo al hombre: Extiende tu mano.
Y él la extendió, y la mano le fue restaurada sana.
Cristo no hizo nada de obras para salvar el
pobre hombre, simplemente lo sanaba con sus palabras. Y es interesante que Cristo ordenaba algo que
era imposible para el hombre, pero con el orden, vino el poder.
6) Y salidos los fariseos, tomaron consejo
con los herodianos contra él para destruirle.
Ellos no pudieron negar su poder, y la
popularidad de Cristo era cada vez mas evidente. Así que solamente pudieron buscar maneras de
matar le, o seguir inventando sus pretextos por no sujetar se a este
gran Rey.
7-8) Mas Jesús se retiró al mar con sus
discípulos, y le siguió gran multitud de Galilea. Y de Judea, de Jerusalén, de Idumea, del otro lado del
Jordán, y de los alrededores de Tiro y de Sidón, oyendo cuán grandes cosas
hacía, grandes multitudes vinieron a él.
Nadie pudo negar su popularidad, y su poder
para sanar, o su sabiduría para enseñar.
No todos vinieron arrepentidos, para entrar
en la salvación, muchos solamente deseaban una sanidad, o vinieron por su
curiosidad.
9-10) Y dijo a sus discípulos que le tuviesen
siempre lista la barca, a causa del gentío, para que no le oprimiesen. Porque había sanado a muchos; de manera que
por tocarle, cuantos tenían plagas caían sobre él.
Cristo estaba en peligro de estar aplastado
por una avalancha de personas.
Y como dije, no todos vinieron amando a este
gran rey, sino solamente para sacar provecho de él, una sanidad, o algo de la
comida gratis. Y después iban a
simplemente regresar a sus vidas de idolatría.
Y cuando hablo de la idolatría, no esto,
necesariamente hablando de algo como la Santa Muerte, que es claramente, un ídolo. Pero en el nuevo testamento dice que hay
ídolos del corazón.
Colosenses 3:5 Haced morir, pues, lo terrenal
en vosotros: fornicación,
impureza, pasiones desordenadas, malos deseos
y avaricia, que es idolatría.
Y todos sabemos que el primer mandamiento
dice…
Éxodo 20:3 No
tendrás dioses ajenos delante de mí.
11-12) Y los espíritus inmundos, al verle, se
postraban delante de él, y daban voces, diciendo: Tú eres el Hijo de Dios. Mas él les reprendía mucho para que no le
descubriesen.
Los demonios normalmente traten de esconder su
presencia, pero cuando Cristo vino, se cayeron en un pánico. Aunque eran eternamente perdidos, su teología
era bastante bien cuando dijeron, Tú eres el Hijo de Dios.
Esto era una verdad que por el momento,
solamente ellos estaban confesando.
13-16) Después subió al monte, y llamó a sí a
los que él quiso; y vinieron a él. Y estableció a doce, para que estuviesen con
él, y para enviarlos a predicar, y que tuviesen autoridad para sanar
enfermedades y para echar fuera demonios: a Simón, a quien puso por sobrenombre
Pedro;
Es interesante que Cristo no buscaba
voluntarios, no, sino que él mismo escogía a los hombres normales que iban a
estar muy cerca de él.
17-19) a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan
hermano de Jacobo, a quienes apellidó Boanerges, esto es, Hijos del
trueno; a Andrés, Felipe, Bartolomé,
Mateo, Tomás, Jacobo hijo de Alfeo, Tadeo, Simón el cananista,
y Judas Iscariote, el que le entregó. Y
vinieron a casa.
A veces hay hermanos que creen que era un
error, escoger a Judas Iscariote. Pero
no, Cristo oraba mucho antes de hacer su selección.
Judas Iscariote nos muestra que se puede
tener malvados, aun entre los lideres de la iglesia, y por esto tenemos que tener
un gobierno Bíblico para resolver tales circunstancias.
20) Y se agolpó de nuevo la gente, de modo
que ellos ni aun podían comer pan.
¡A veces, durante los tiempos buenos de la
iglesia, estamos tan ocupados que ni hay tiempo de comer! Yo he vivido por tales tiempos. Y recuerdo trabajando con iglesias en Tijuana
México, que dijeron que eran tan, tan ocupados en la obra, pero yo dijo, “Pero
veo que ustedes comen sentados ni esto es siempre posible para nosotros”.
21) Cuando lo oyeron los suyos, vinieron para
prenderle; porque decían: Está fuera de sí.
No es muy claro quienes eran “los suyos”. Cristo tenia hermanos, hermanas, primos y
primas, y tal vez amigos de la familia también.
Y como Cristo no estaba comiendo, y como
trabajaba día y noche, se pensaron que estaba fuera de su razón.
Y tal vez otros molestaban a su familia,
diciendo, “¿No es este tu sobrino?”
“¡Mira como predica y como todo el mundo va a él, tienes que hacer
algo!”
Y si estos “suyos”, no estaban viniendo a
este gran rey, con arrepentimiento y con fe, esto pudo ser simplemente su pretexto
por rechazar la verdad.
En otra parte dice que los hermanos de Cristo
ni creyeron en el, en el principio.
Juan 7:1-5 Después
de estas cosas, andaba Jesús en Galilea; pues no
quería andar en Judea, porque los judíos
procuraban matarle. Estaba cerca la
fiesta de los judíos, la de los tabernáculos;
y le dijeron sus hermanos: Sal de aquí, y vete a Judea, para que
también tus discípulos vean las obras que haces. Porque ninguno que procura darse a conocer
hace algo en secreto. Si estas cosas haces, manifiéstate al mundo. Porque ni aun sus hermanos creían en él.
Mas tarde sus hermanos sí creyeron en él pero
no en el principio, y como incrédulos, tenían que estar muy activos en produciendo
sus pretextos.
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Bueno, hasta aquí hemos visto la variedad de pretextos
que la gente se levantan cuando no quieren ni arrepentir se, ni creer en el
gran Rey, Cristo Jesús. Pero ahora viene
el pretexto fatal.
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22) Pero los escribas que habían venido de Jerusalén
decían que tenía a Beelzebú, y que por el príncipe de los demonios echaba fuera
los demonios.
Esto, realmente era el colmo. Los escribas de Jerusalén, donde había mucha
maldad, sabían que Cristo tenia grandes poderes, que era muy compasivo, que era
cada vez mas popular, pero ellos jamás iban venir arrepentidos ni con fe.
Entonces como los demás que rechazaban a la
verdad, se tenían que levantar su pretexto. Pero ellos tenían el pretexto fatal.
Ellos dijeron que Cristo hizo todo esto, por
el poder del diablo.
Cristo primeramente va a mostrar que lo que
dijeron no tenia sentido, pero también que ellos estaban entrando en un pecado
que simplemente no tiene perdón.
23-24) Y habiéndolos llamado, les decía en
parábolas: ¿Cómo puede Satanás echar fuera a Satanás? Si un reino está dividido contra sí mismo, tal
reino no puede permanecer.
No tenia sentido decir que Satanás estaba
echando fuera a sus mismos demonios y mandando les a la fosa. Haciendo esto su reino iba a caer aun mas
rápidamente.
25-26) Y si una casa está dividida contra sí
misma, tal casa no puede permanecer. Y
si Satanás se levanta contra sí mismo, y se divide, no puede permanecer, sino
que ha llegado su fin.
Cristo estaba muy paciente con ellos, porque
sabia que tenia que refutar esto como un error muy grave, algo contagioso.
27) Ninguno puede entrar en la casa de un
hombre fuerte y saquear sus bienes, si antes no le ata, y entonces podrá
saquear su casa.
Y Cristo está haciendo esto entre
nosotros. Por esto hay bautizos. Es que Cristo ha atado al hombre fuerte y nos
ha ayudado a nosotros a saquear personas que antes estaban bajo su influencia.
Pero esa acusación de que Cristo obraba por
el poder del diablo, era un pecado imperdonable.
28) De cierto os digo que todos los pecados
serán perdonados a los hijos de los hombres, y las blasfemias cualesquiera que
sean;
Bueno, esto no decía que todo pecado era
perdonado automáticamente.
Sabemos que comparando escritura con
escritura, que los pecados son perdonados cuando haya una fe autentica, con el
arrepentimiento verdadero.
28-30) De cierto os digo que todos los
pecados serán perdonados a los hijos de los hombres, y las blasfemias
cualesquiera que sean; pero cualquiera
que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, sino que es reo
de juicio eterno. Porque ellos habían
dicho: Tiene espíritu inmundo.
Hay muchas formas de blasfemia. En este país, muchos andan blasfemando el
nombre de Cristo, en Ingles diciendo “Jesús Christ” usando su nombre como cosa
común y corriente. O hay muchachas que
no pueden terminar una frase sin decir “¡Oh my God!
O en español se puede encontrar personas que
dicen “¡Hay Dios Mío!” todo el día. Y
esto está en contra del tercer mandamiento que dice.
Éxodo 20:7 No
tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano; porque no
dará por inocente Jehová al
que tomare su nombre en vano.
Entonces esto es una forma de blasfemia, pero
esto puede encontrar su perdón, para la persona que realmente está arrepentida. Es que esto no es la blasfemia del Espíritu
Santo, que no tiene perdón.
Y es muy curioso, que se puede blasfemar el
nombre de Cristo, y mas tarde encontrar el perdón. Se puede hasta blasfemar el nombre del Padre,
y mas tarde encontrar el perdón, con un autentico y permanente arrepentimiento.
Pero con el Espíritu Santo, no. Bueno, vamos a clarificar esto en un momento,
cerrando. Pero hay un poco mas del
capitulo.
31) Vienen después sus hermanos y su madre, y
quedándose afuera, enviaron a llamarle.
Sus hermanos, aun viviendo en su pretexto,
querían agarrar lo y llevar lo a su casa, pensando que era fuera de si. Y esta vez a lo mejor se presionaron a su madre,
María, quien como madre, a lo mejor estaba preocupada de que no estaba ni
comiendo bien.
32-35) Y la gente que estaba sentada
alrededor de él le dijo: Tu madre y tus hermanos están afuera, y te buscan. Él les respondió diciendo: ¿Quién es mi madre
y mis hermanos? Y mirando a los que
estaban sentados alrededor de él, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. Porque todo aquel que hace la voluntad de
Dios, ese es mi hermano, y mi hermana, y mi madre.
Cristo jamás faltaba el respeto a su madre,
pero por el momento, era mas importante continuar su predicación, porque esto
siempre era la gran prioridad para Cristo.
Otra gran prioridad para Cristo y hasta para
Santiago, era no solamente oír la palabra, sino hacer la voluntad de Dios
revelada en la palabra.
Santiago dijo en su gran carta…
Santiago 1:22 Pero
sed hacedores de la palabra,
y no tan solamente oidores,
engañándoos a vosotros mismos.
Los hermanos pueden levantar todos los pretextos
que quieren, pero no van a lograr nada con esto, sino que es importante hacer
y no solamente oír. Cristo dijo en otra
parte.
Mateo 7:24-27 Cualquiera,
pues, que me oye estas palabras, y las hace,
le compararé a un hombre prudente, que
edificó su casa sobre la roca.
Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron
vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada
sobre la roca.
Pero cualquiera que me oye estas palabras y
no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre
la arena; y descendió lluvia, y vinieron
ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y
fue grande su ruina.
*------------------------------- Conclusión
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En fin, como dije, quiero clarificar sobre
este pecado misterioso, de blasfemar al Espíritu Santo, un pecado que
simplemente no tiene perdón.
Por esto, lo estoy llamando el pretexto fatal.
El gran Nicodemo puede ayudar nos con esto.
Juan 3:1-2 Había
un hombre de los fariseos que se llamaba Nicodemo,
un principal entre los judíos. Este vino a Jesús de noche, y le dijo: Rabí,
sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer
estas señales que tú haces, si no está Dios con él.
La gran mayoría de los fariseos sabían que
Cristo vino de Dios, y que no trabajaba por el diablo. Y el gran San Pablo cometía muchas
blasfemias antes de venir a Cristo, pero jamás cometía la blasfemia del
Espíritu Santo.
1 Timoteo 1:13 Habiendo yo sido antes blasfemo, perseguidor e injuriador;
mas fui recibido a misericordia porque lo
hice por ignorancia, en incredulidad.
Pero los otros fariseos, sabían que Cristo
era el hijo de Dios, esto habiendo sido revelado a ellos por el Espíritu Santo,
y aun así, por su pretexto fatal, dijeron que Cristo obraba con el poder
del diablo.
Esto era el pecado, que simplemente, no tiene
perdón.
Y si tu quieres caminar con Cristo, sabiendo
que estás bien con él, puedes pasar en unos momentos, y oraremos contigo. Vamos a Orar