22 de octubre de 2021

  Verificando La Limpieza

Levítico 14:1-57

 

El libro de Levítico, realmente no es muy largo, tiene 27 capítulos, y hemos estudiado ya mas o menos la mitad.  Pero estamos descubriendo que el Espíritu Santo de Dios ha dedicado mucha área, mucho material, al tema de la lepra.  Y hay acuerdo general entre los expositores, de que la lepra es un tipo, o sea una ilustración del pecado.

 

Mientras el mundo hace todo lo que puede para presentar el pecado como algo fascinante, algo deseable, pausa, la palabra lo presenta como algo sumamente repugnante.

 

Y espiritualmente, es algo sucio.  Por esto, la lepra en estos capítulos no fue al medico, sino que se fue al sacerdote.  Y el sacerdote no estaba sanando a nadie, solamente reconociendo cuando la lepra aparecía, y cuando, por la gracia de Dios, se sanaba.

 

Y en el nuevo testamento, Pablo aun está pensando en términos de lo puro y lo inmundo, cuando dice en…

 

2 Corintios 6:17    Salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor,

Y no toquéis lo inmundo;

Y yo os recibiré.

 

Y esto fue una cita tanto de Isaías como de Ezequiel, hablando de la manera en que los que andan con Dios, tienen que evitar lo inmundo.

 

1-4) Y habló Jehová a Moisés, diciendo:  Esta será la ley para el leproso cuando se limpiare: Será traído al sacerdote, y éste saldrá fuera del campamento y lo examinará; y si ve que está sana la plaga de la lepra del leproso, el sacerdote mandará luego que se tomen para el que se purifica dos avecillas vivas, limpias, y madera de cedro, grana e hisopo.

 

El sacerdote tenia que salir, fuera del campamento, porque el inmundo no pudo, aun entrar con los demás hermanos.   Es que aunque se sentía sano, limpio, esto tenia que estar verificado, formalmente, y tomaba tiempo.

 

5-7) Y mandará el sacerdote matar una avecilla en un vaso de barro sobre aguas corrientes.  Después tomará la avecilla viva, el cedro, la grana y el hisopo, y los mojará con la avecilla viva en la sangre de la avecilla muerta sobre las aguas corrientes; y rociará siete veces sobre el que se purifica de la lepra, y le declarará limpio; y soltará la avecilla viva en el campo.

 

Muchos vean el evangelio en estos dos pájaros.  El que murió, era como Cristo muriendo en la cruz, para ti.  El que fue soltado era como Cristo resucitando de los muertos, para confirmar, o sea verificar, tu limpieza.

Hablando de Cristo vimos en…

 

Romanos 4:25   El cual fue entregado por nuestras transgresiones,

y resucitado para nuestra justificación.

 

Y esta fue una ceremonia, como para nosotros, el bautismo, y la santa cena son ceremonias.  Y nótalo como se tenían tanto la sangre como el agua.

 

Muchos vean Cristo en esto también.

 

Juan 19:34     Pero uno de los soldados le abrió el costado con una lanza,

y al instante salió sangre y agua.

 

Sangre para pagar por tu justificación, y agua para limpiar te, en el gran proceso de tu santificación.

 

También en…

1 Juan 5:6     Este es Jesucristo, que vino mediante agua y sangre; no

mediante agua solamente, sino mediante agua y sangre. Y el Espíritu es el que da testimonio; porque el Espíritu es la verdad.

 

Así que este capitulo tiene elementos de alegría, revelando aspectos de nuestra redención, pausa, pero también tiene fuertes amonestaciones.

 

8) Y el que se purifica lavará sus vestidos, y raerá todo su pelo, y se lavará con agua, y será limpio; y después entrará en el campamento, y morará fuera de su tienda siete días.

 

Aunque estaba restaurado al campamento, aun no pudo vivir en su tienda, porque su limpieza tenia que estar verificada.  Y esto es el lado de amonestación, que muchos han notado estudiando todo esto.

 

En las iglesias modernas, se presume que todos ya son automáticamente sanos, si vienen a la iglesia, por supuesto tienen que estar ya bien con Dios.   Pero en este capitulo, no es tan fácil, ni es tan rápido.

 

9-12) Y el séptimo día raerá todo el pelo de su cabeza, su barba y las cejas de sus ojos y todo su pelo, y lavará sus vestidos, y lavará su cuerpo en agua, y será limpio.  El día octavo tomará dos corderos sin defecto, y una cordera de un año sin tacha, y tres décimas de efa de flor de harina para ofrenda amasada con aceite, y un log de aceite.

Y el sacerdote que le purifica presentará delante de Jehová al que se ha de limpiar, con aquellas cosas, a la puerta del tabernáculo de reunión;

y tomará el sacerdote un cordero y lo ofrecerá por la culpa, con el log de aceite, y lo mecerá como ofrenda mecida delante de Jehová.

 

Había mas ceremonia, y hasta una expiación, por el pecado.  Es que en muchos casos, la lepra fue mandada, por la providencia de Dios, respondiendo al pecado.

Vimos esto la semana pasada cuando la hermana mayor de Moisés fue pegada can la lepra por su rebelión.

 

Números 12:9-15     Entonces la ira de Jehová se encendió contra ellos;

y se fue.  Y la nube se apartó del tabernáculo, y he aquí que María estaba leprosa como la nieve; y miró Aarón a María, y he aquí que estaba leprosa.

 

11 Y dijo Aarón a Moisés: !!Ah! señor mío, no pongas ahora sobre nosotros este pecado; porque locamente hemos actuado, y hemos pecado.

 

12 No quede ella ahora como el que nace muerto, que al salir del vientre de su madre, tiene ya medio consumida su carne.  Entonces Moisés clamó a Jehová, diciendo: Te ruego, oh Dios, que la sanes ahora.

 

14 Respondió Jehová a Moisés: Pues si su padre hubiera escupido en su rostro, ¿no se avergonzaría por siete días? Sea echada fuera del campamento por siete días, y después volverá a la congregación.

 

Obviamente Dios estaba bastante molestado para mandar algo tan severo.

 

15 Así María fue echada del campamento siete días; y el pueblo no pasó adelante hasta que se reunió María con ellos.

 

Así que parte del proceso de la reintegración con el pueblo era un sacrificio por el pecado.

 

13) Y degollará el cordero en el lugar donde se degüella el sacrificio por el pecado y el holocausto, en el lugar del santuario; porque como la víctima por el pecado, así también la víctima por la culpa es del sacerdote; es cosa muy sagrada.

 

Otros vean una deuda con Dios que la persona excluida acumulaba por su lepra, andando fuera, lejos de todos.  Claro en todo ese tiempo jamás vino al tabernáculo para alabar al Señor, y esto también era un gran pecado.

 

14) Y el sacerdote tomará de la sangre de la víctima por la culpa, y la pondrá el sacerdote sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho.

 

Esto es como los ritos que vimos en la instalación de los sacerdotes.  Todo lo que esa persona escuchaba tenia que estar limpio, todo lo que se hacia con sus manos tenia que estar santo, y caminando, solamente iba a hacer cosas, que honraban a Dios.  En fin, su restauración era un gran evento, con muchos detalles.

Por esto, a mi me gusta la manera en que nuestros bautismos son públicos, en la playa, con mucha celebración y comida, porque es un gran evento, marcando un gran cambio, permanente en nuestros hermanos y hermanas.

 

15-18) Asimismo el sacerdote tomará del log de aceite, y lo echará sobre la palma de su mano izquierda, y mojará su dedo derecho en el aceite que tiene en su mano izquierda, y esparcirá del aceite con su dedo siete veces delante de Jehová.

 

Y de lo que quedare del aceite que tiene en su mano, pondrá el sacerdote sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho, encima de la sangre del sacrificio por la culpa.

 

Y lo que quedare del aceite que tiene en su mano, lo pondrá sobre la cabeza del que se purifica; y hará el sacerdote expiación por él delante de Jehová.

 

La purificación de un leproso era algo grande, inolvidable, por una gran misericordia de Dios.  Mientras otros leprosos andaban perdiendo la función de sus nervios, perdiendo piel y hasta miembros como brazos o piernas, y también perdiendo su vista, ese afortunado estaba rescatado.

 

Y no olvides hermano, hermana, joven, esto representaba simbólicamente, tu rescate de la plaga de tu alma, el pecado.

 

19-20) Ofrecerá luego el sacerdote el sacrificio por el pecado, y hará expiación por el que se ha de purificar de su inmundicia; y después degollará el holocausto, y hará subir el sacerdote el holocausto y la ofrenda sobre el altar. Así hará el sacerdote expiación por él, y será limpio.

 

Esa ceremonia alegre pudiera ocupar gran parte del día, pausa, como nuestros bautismos pueden ocupar gran parte del día.  Era algo de celebrar, y algo de nunca, jamás, olvidar.

 

21-22) Mas si fuere pobre, y no tuviere para tanto, entonces tomará un cordero para ser ofrecido como ofrenda mecida por la culpa, para reconciliarse, y una décima de efa de flor de harina amasada con aceite para ofrenda, y un log de aceite, y dos tórtolas o dos palominos, según pueda; uno será para expiación por el pecado, y el otro para holocausto.

 

El pobre pudo pagar menos, pero no pudo escapar todos los gastos.  Este era un gran día, y aun si tenia que pedir ayuda, tenia que traer lo básico, para cumplir la ceremonia correctamente.

 

23-24) Al octavo día de su purificación traerá estas cosas al sacerdote, a la puerta del tabernáculo de reunión, delante de Jehová.  Y el sacerdote tomará el cordero de la expiación por la culpa, y el log de aceite, y los mecerá el sacerdote como ofrenda mecida delante de Jehová.

No era para menos.  Y uno que pasaba por todo esto seria muy conocido.  La lepra, aunque quitada, pudiera estar fijada a su nombre.  Hay un ejemplo de esto en los tiempos de Cristo Jesús.

 

Mateo 26:6-7   Y estando Jesús en Betania, en casa de Simón el leproso,

vino a él una mujer, con un vaso de alabastro de perfume de gran precio, y lo derramó sobre la cabeza de él, estando sentado a la mesa.

 

Seguramente este Simón, era leproso antes, y ahora sanado por la misericordia de Dios, pero aun así, “leproso” formaba parte de su nombre.

 

Continuando…

 

25-28) Luego degollará el cordero de la culpa, y el sacerdote tomará de la sangre de la culpa, y la pondrá sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho.  Y el sacerdote echará del aceite sobre la palma de su mano izquierda;  y con su dedo derecho el sacerdote rociará del aceite que tiene en su mano izquierda, siete veces delante de Jehová.

También el sacerdote pondrá del aceite que tiene en su mano sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho, en el lugar de la sangre de la culpa.

 

Otra vez muchos detalles de estudiar.  ¿Pero por que?  Es que hermano, cuando Dios rescataba a ti, de la lepra, la plaga de tu alma, era un gran milagro, que jamás podemos olvidar.  Y también debemos de estar aprendiendo cómo caminar mas y mas en la santidad, casi como los sacerdotes.

 

Y también debemos de recodar, que otros, que no estaban salvados, aun andan afuera, en su lepra, pudriendo se mas y mas, perdiendo todos sus sensibilidades, hasta que viene el gran día final, cuando ellos, tal vez amigos o conocidos tuyos, y estos serán arrojados al infierno, para sufrir algo insoportable, para toda la eternidad.

 

29-32) Y lo que sobre del aceite que el sacerdote tiene en su mano, lo pondrá sobre la cabeza del que se purifica, para reconciliarlo delante de Jehová.  Asimismo ofrecerá una de las tórtolas o uno de los palominos, según pueda.  Uno en sacrificio de expiación por el pecado, y el otro en holocausto, además de la ofrenda; y hará el sacerdote expiación por el que se ha de purificar, delante de Jehová.  Esta es la ley para el que hubiere tenido plaga de lepra, y no tuviere más para su purificación.

 

Otra vez, muchos detalles, no tan fáciles de estudiar, pausa, pero Dios te va a bendecir, por tu paciencia, dando honor a su palabra, y no simplemente soltando sobre todo, como hacen muchos en nuestros tiempos, si aun se atreven a estudiar un libro como Levítico.

 

Ahora terminaremos con otro tema.  En el ultimo estudio, se presentaba la lepra en una persona, y después la lepra en su ropa.

 

Ahora tuvimos la limpieza de una persona, y ahora la limpieza de una caza con la lepra.

 

33-35) Habló también Jehová a Moisés y a Aarón, diciendo:  Cuando hayáis entrado en la tierra de Canaán, la cual yo os doy en posesión, si pusiere yo plaga de lepra en alguna casa de la tierra de vuestra posesión,   vendrá aquel de quien fuere la casa y dará aviso al sacerdote, diciendo: Algo como plaga ha aparecido en mi casa.

 

Aun viviendo en el desierto, moraban en tiendas, y no en casas, pero llegando a la tierra prometida, Dios dijo que él mismo iba a poner esa plaga dentro de unas casas.

 

Y si la lepra es símbolo por el pecado, pausa, entonces está hablando de casas, dentro del pueblo de Dios, que realmente tienen problemas.

 

Y si el dueño descubría evidencia de ese problema, no lo pudo esconder, como muchos hermanos hacen ya, sino que tenia que ir al sacerdote.

 

36) Entonces el sacerdote mandará desocupar la casa antes que entre a mirar la plaga, para que no sea contaminado todo lo que estuviere en la casa; y después el sacerdote entrará a examinarla.

 

Muchos en nuestros tiempos dirían que Dios pudo tener algo que ver tal vez en unas áreas de sus vidas, pero no era Señor de su casa.  Pero esto es falso, si Dios es tu Señor, es Señor de todo tuyo, y todo debe de estar en orden.

 

37-38) Y examinará la plaga; y si se vieren manchas en las paredes de la casa, manchas verdosas o rojizas, las cuales parecieren más profundas que la superficie de la pared, el sacerdote saldrá de la casa a la puerta de ella, y cerrará la casa por siete días.

 

Los dueños no pudieron decir, como en nuestros tiempos, “Bueno todo anda bien con nosotros, tenemos todo bajo control”, aun cuando sus hijos andan dedicando se mas y mas al pensamiento del mundo, o sus hijas andan formando amistades románticas con los incrédulos.  Pero se declaran públicamente, “todo anda bien con nosotros”.

 

Pero una vez mas aquí, la limpieza tenia que estar verificada, por un sacerdote que sabia cómo interpretar las síntomas.

 

Y tenían que dedicar tiempo al estudio, sacando todas sus cosas.  Era una gran molestia, pero esto es, siempre el precio del descuido de los padres, que dejan creciendo el pecado debajo de su techo.

 

39-41) Y al séptimo día volverá el sacerdote, y la examinará; y si la plaga se hubiere extendido en las paredes de la casa, entonces mandará el sacerdote, y arrancarán las piedras en que estuviere la plaga, y las echarán fuera de la ciudad en lugar inmundo.  Y hará raspar la casa por dentro alrededor, y derramarán fuera de la ciudad, en lugar inmundo, el barro que rasparen.

 

Si tu casa era un desastre, seria necesario tomar medidas.  Muchas veces en nuestros tiempos, no se hacen nada, hasta que viene el divorcio, o los niños se conviertan en delincuentes o perversos sexuales.

 

42-44) Y tomarán otras piedras y las pondrán en lugar de las piedras quitadas; y tomarán otro barro y recubrirán la casa.  Y si la plaga volviere a brotar en aquella casa, después que hizo arrancar las piedras y raspar la casa, y después que fue recubierta, entonces el sacerdote entrará y la examinará; y si pareciere haberse extendido la plaga en la casa, es lepra maligna en la casa; inmunda es.

 

El sacerdote tenia la autoridad de declarar tu casa un desastre.  Hoy en día el hermano diría, “No es para tanto, yo tengo ya todo bajo control”.  Pero no era así, bajo la ley de Levítico.

 

45) Derribará, por tanto, la tal casa, sus piedras, sus maderos y toda la mezcla de la casa; y sacarán todo fuera de la ciudad a lugar inmundo.

 

Llegando al fin del libro de Josué, el gran general dijo…

Josué 24:15    Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién

sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová.

 

Pero hoy en día, muchos padres andan tan ocupados o hasta tan débiles, que ni aun saben el territorio, que el enemigo anda, ganando en su casa.

 

46-47) Y cualquiera que entrare en aquella casa durante los días en que la mandó cerrar, será inmundo hasta la noche.  Y el que durmiere en aquella casa, lavará sus vestidos; también el que comiere en la casa lavará sus vestidos.

 

Las reglas son ceremoniales, pero nos enseñan que este libro de Levítico, es un libro sobre la santidad de Dios, y la de su pueblo.

 

48) Mas si entrare el sacerdote y la examinare, y viere que la plaga no se ha extendido en la casa después que fue recubierta, el sacerdote declarará limpia la casa, porque la plaga ha desaparecido.

 

Y esto es lo que oramos para ti hermano, que si hay problemas en tu casa, que sean corregidos, que la santidad sea restaurada, y que tus hijos vivan en la seguridad espiritual.  ¿Amen?

49-52) Entonces tomará para limpiar la casa dos avecillas, y madera de cedro, grana e hisopo;  y degollará una avecilla en una vasija de barro sobre aguas corrientes.

 

Y tomará el cedro, el hisopo, la grana y la avecilla viva, y los mojará en la sangre de la avecilla muerta y en las aguas corrientes, y rociará la casa siete veces.

 

Y purificará la casa con la sangre de la avecilla, con las aguas corrientes, con la avecilla viva, la madera de cedro, el hisopo y la grana.

 

Otra vez un gran tramite, pero era algo de celebrar, y no de olvidar.

 

53) Luego soltará la avecilla viva fuera de la ciudad sobre la faz del campo. Así hará expiación por la casa, y será limpia.

 

Esto es también nuestro deseo para ti hermano, que en tu casa, existe el poder de la resurrección, y no un descuido, abriendo gritas al enemigo.

 

54-57) Esta es la ley acerca de toda plaga de lepra y de tiña, y de la lepra del vestido, y de la casa, y acerca de la hinchazón, y de la erupción, y de la mancha blanca, para enseñar cuándo es inmundo, y cuándo limpio. Esta es la ley tocante a la lepra.

 

Era mucho material, sobre la lepra, pero en el plan de Dios, era necesario para nosotros, dedicar nos a algo tan repugnante, para realmente tomar medidas en el control del pecado.

 

*------------------------------- Doctrina -----------------------------*

 

Lo interesante de este capitulo era la realidad de que el hermano no pudo declarar a si mismo como limpio.  Esto tenia que estar comprobado, verificado, por una autoridad que tenia experiencia en estos asuntos.

 

En estos asuntos, es muy fácil para uno, andar engañando a si mismo, declarando a todos, con confianza, que es limpio, aun cuando haya asuntos pudriendo en la oscuridad, de tu vida.

 

Hebreos 3:12-13     Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros

corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo; antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.

 

Y si tu quieres estar seguro, de que andes en la honestidad, y no en el auto engaño, tan común en nuestros tiempos, puedes pasar en unos momentos, y oraremos contigo.

 

Vamos a Orar