29 de marzo de 19

Ŕ Lo Hiciste Para Mi?

Zacar’as 7:1-14

 

En el nuevo testamento San Pablo dijo algo, que a lo mejor vino de este capitulo.

 

1 Corintios 10:31    Si, pues, comŽis o bebŽis,

                     o hacŽis otra cosa,

                     hacedlo todo para la gloria de Dios.

 

Esto habla de nuestro motivo en haciendo cosas.  A veces hay familias que oren antes de comer, pero ni piensan en Dios, mientras se oren, sino que es simplemente un rito, que se repitan con prisa, antes de comer.

 

Pensando un poco en esto, podemos empezar.

 

1) Aconteci— que en el a–o cuarto del rey Dar’o, a los cuatro d’as del mes noveno, que es Quisleu, lleg— palabra de Jehov‡ a Zacar’as.

 

Recordando que Zacar’as profetizaba despuŽs del cautiverio de Babilonia, unos siglos antes de la venida de Cristo.  El viejo testamento estaba llegando a su fin, y tristemente, se contaban los a–os, no segśn uno de sus propios reyes, sino conforme a los reyes paganos, que ten’an el dominio sobre ellos.

 

2) En aquel tiempo el pueblo de Bet-el hab’a enviado a Sarezer, con Regem-melec y sus hombres, a implorar el favor de Jehov‡,

 

Vinieron para orar, y para preguntar.  Esto ya es un buen rato despuŽs de las visiones antes de Zacar’as.

 

Y estos nombres no son nombres hebraicos sino que suenan como nombres de los Babilonios.  Estos a lo mejor eran jud’os poderosos, que llevaban estos nombres porque se nacieron en Babilonio durante el cautiverio, que acaba de terminar.

 

2) En aquel tiempo el pueblo de Bet-el hab’a enviado a Sarezer, con Regem-melec y sus hombres, a implorar el favor de Jehov‡,  y a preguntar a los sacerdotes que estaban en la casa de Jehov‡ de los ejŽrcitos, y a los profetas: ÇŔLloraremos en el mes quinto? ŔHaremos abstinencia, como la hemos venido haciendo desde hace algunos a–os?Č

Es que se inventaron unas costumbres de lamentar y hasta de ayunar en ciertos meses para recordar las fechas graves del desastre de la destrucci—n del templo y la ca’da de JerusalŽn a las fuerzas de Nabucodonosor.

 

Esto no era algo que Dios mandaba, y observando el contexto, ni sabemos si era algo que se hicieron para Dios, o si solamente hicieron esto siendo muy tristes por lo que pas—.

 

4) Recib’, pues, esta palabra de Jehov‡ de los ejŽrcitos:

 

Ahora bien, hermanos, tenemos que estar preparados de que cuando pides algo de Dios, pausa, te puedes recibir una respuesta que no esperaba.

 

Esto vimos en domingo cuando Nicodemo vino a Cristo en la noche para hablar de su ministerio, y de repente Cristo respond’a que ese fariseo tenia que nacer de nuevo.

 

Juan 3:2-3 Este vino a Jesśs de noche, y le dijo: Rab’,

sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas se–ales que tś haces, si no est‡ Dios con Žl.

 

Respondi— Jesśs y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.

 

El punto es que, Dios no tiene que responder ni la manera en que te quieres, ni en la manera en que te esperes.

 

5) ÇDi a todo el pueblo del pa’s, y a los sacerdotes:

ŇCuando ayunabais y llorabais en el quinto y en el sŽptimo mes durante estos setenta a–os, ŔhabŽis ayunado para m’?

 

Dios respond’a con una pregunta, sobre estas tradiciones,

tradiciones que Dios ni ha ordenado, pero haciendo todo esto, Ŕlo hac’an para Dios?  ŔO ten’an otros motivos?

 

Esto era una pregunta muy importante llegando poco a poco al nuevo testamento.  Porque cuando cristo finalmente llegaba, muchos practicaban sus ritos religiosos, pero no para Dios.

 

Un ejemplo.

 

Cristo ense–aba que esto era una tentaci—n que siempre est‡ presente.

 

Mateo 6:1-4    Guardaos de hacer vuestra justicia delante de

los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendrŽis recompensa de vuestro Padre que est‡ en los cielos.

 

Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hip—critas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.

 

Mas cuando tś des limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha, para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensar‡ en pśblico.

 

Si el motivo no era para servir a Dios, sino para impresionar a los hombres, Cristo dijo que era una forma de hipocres’a.

 

As’ que, en el caso de los fariseos, no, no lo hicieron para Dios, sino que ellos estaban haciendo mucha religi—n, pero para ellos mismos.

 

6) Y cuando com’ais y beb’ais, Ŕno com’ais y beb’ais para vosotros mismos?ÓČ

Y tengo que preguntar a ti, hermano, hermana, con la Santa Cena llegando en una semana, cuando ores antes de comer, pienses en tu Dios, o solamente es un ritual vac’o, que haces, con tu mente en nada mas que la comida, o en otros asuntos.

 

7) ŔAcaso no son Žstas las palabras que proclam— Jehov‡ por medio de los primeros profetas, cuando JerusalŽn estaba habitada y tranquila, y las ciudades de sus alrededores y el Neguev y la Sefela estaban tambiŽn habitados?

 

Aqu’ Dios estaba recordando les de sus padres, que recibieron mucha palabra de Dios, y que ten’an mucha religi—n y tradici—n, pero se viv’an vidas que eran horribles.  Tan horribles que eran ellos que provocaban el gran exilio, de setenta a–os.

 

8-9) Recibi— tambiŽn Zacar’as esta palabra de Jehov‡: ÇAs’ habl— Jehov‡ de los ejŽrcitos: Juzgad conforme a la verdad;

haced misericordia y piedad cada cual con su hermano;

Dios no estaba tan interesado en los detalles de sus costumbres humanas, sino en c—mo estaban cumpliendo sus mandamientos.

8-9) Recibi— tambiŽn Zacar’as esta palabra de Jehov‡: ÇAs’ habl— Jehov‡ de los ejŽrcitos: Juzgad conforme a la verdad;

haced misericordia y piedad cada cual con su hermano; no oprim‡is a la viuda, al huŽrfano, al extranjero ni al pobre,

ni ninguno piense mal en su coraz—n contra su hermano.Č

 

Y hermanos, esto es, y tiene que ser un punto constante en las Sagradas Escrituras.

 

En el primer capitulo de Isa’as el pueblo tenia mucha religi—n, pero Dios no deseaba nada de ella.

 

Isa’as 1:11-12 ŔPara quŽ me sirve, dice Jehov‡, la multitud

de vuestros sacrificios? Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos cabr’os.

 

ŔQuiŽn demanda esto de vuestras manos, cuando ven’s a presentaros delante de m’ para hollar mis atrios?

 

La primera vez en que te lees algo semejante es un shock.  ŔComo es posible que Dios estaba rechazando toda su religi—n, hasta sus oraciones estaban rechazadas?  Pero la raz—n viene al misma vez.

Isa’as 1:15-17 Cuando extend‡is vuestras manos, yo esconderŽ

de vosotros mis ojos; asimismo cuando multipliquŽis la oraci—n, yo no oirŽ; llenas est‡n de sangre vuestras manos.

 

Lavaos y limpiaos; quitad la iniquidad de vuestras obras de delante de mis ojos; dejad de hacer lo malo; aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huŽrfano, amparad a la viuda.

 

Es que ten’an mucha religi—n, muchos ritos repetidos, pero sus vidas eran desastres, llenas de inequidad.

 

Es que deseaban participar en una forma de religi—n para ellos mismos, pero en cuanto a los mandamientos actuales de Dios, en cuanto a lo que Dios consideraba como importante, pausa eran sordos.

 

Y ten cuidado hermano, porque el mismo puede pasar en las iglesias modernas.

Y hay personas que son muy activas en las religiones falsas.  Hay muchos en MŽxico, supuestamente cinco mil personas, que son devotas a la Santa Muerte.

 

Son religiosos, tienen sus ritos, pero no vivan, obviamente en la obediencia a Dios.

 

Entonces con mucha religi—n o con poca, la pregunta siempre tiene que ser, ŇŔLo Hiciste Para Mi?Ó, Dios preguntando.

 

Esto es f‡cil de determinar, observando la manera en que responden a la palabra, a los mandamientos, de Dios.

 

11-12) Pero no quisieron escuchar, sino que volvieron la espalda y se taparon los o’dos para no o’r; endurecieron su coraz—n como diamante, para no o’r la Ley ni las palabras que Jehov‡ de los ejŽrcitos enviaba por su esp’ritu, por medio de los primeros profetas. Por tanto, Jehov‡ de los ejŽrcitos se enoj— mucho.

 

No importa la mucha religi—n que tiene uno, lo importante para Dios es si estamos atento a su palabra, y no si andamos inventando y siguiendo fielmente, un sin fin de costumbres.

 

El problema era presente durante el nuevo testamento porque hasta Santiago tenia que hablar de esto.

 

Santiago 1:27  La religi—n pura y sin m‡cula delante de Dios

el Padre es esta: Visitar a los huŽrfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.

 

ŔEsto es una descripci—n de tu vida Cristiana, hermano?

 

Vimos el mismo en el libro de Miqueas, durante el mismo tiempo de Zacar’as.

 

Miqueas 6:8    Oh hombre, Žl te ha declarado lo que es bueno,

y quŽ pide Jehov‡ de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.

 

Y esto tambiŽn era la respuesta a una pregunta necia.

 

Miqueas 6:6-8 ŔCon quŽ me presentarŽ ante Jehov‡, y adorarŽ

al Dios Alt’simo? ŔMe presentarŽ ante Žl con holocaustos, con becerros de un a–o?

 

ŔSe agradar‡ Jehov‡ de millares de carneros, o de diez mil arroyos de aceite? ŔDarŽ mi primogŽnito por mi rebeli—n, el fruto de mis entra–as por el pecado de mi alma?

 

Oh hombre, Žl te ha declarado lo que es bueno, y quŽ pide Jehov‡ de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.

 

Es siempre el mismo.  Los hombres vienen a Dios con la religi—n con que se sientan c—modos, con sus tradiciones y sus rituales, en vez de concentrar en lo que Dios ha mandado.

 

13) ÇY aconteci— que, as’ como Žl clam— y no escucharon, tambiŽn ellos clamaron y yo no escuchŽ, dice Jehov‡ de los ejŽrcitos,

 

Es peligroso vivir as’, con mucha religi—n, y mucha desobediencia al mismo tiempo.

 

Pero en la carne, el hombre siempre est‡ mas c—modo con sus rituales, y costumbres, que con la obediencia.

 

Ahora a la ultima parte.

 

13-14) ÇY aconteci— que, as’ como Žl clam— y no escucharon, tambiŽn ellos clamaron y yo no escuchŽ, dice Jehov‡ de los ejŽrcitos, sino que los esparc’ como con un torbellino por todas las naciones que ellos no conoc’an, y la tierra fue desolada tras ellos, sin quedar quien fuera ni viniera; pues convirtieron en desierto la tierra deseable.Č

 

La tierra prometida era una tierra lujosa, llena de recursos.  Pero por jugar su juego de religi—n, y superstici—n, fue convertido en un desierto.

 

Y despuŽs de Cristo, otra vez, la cuidad de JerusalŽn tenia que estar destruida, por el farise’smo.

 

Como Cristo denunciaba a ellos en Mateo 23:23

 

Mateo 23:23    !!Ay de vosotros, escribas y fariseos,

hip—critas! porque diezm‡is la menta y el eneldo y el comino, y dej‡is lo m‡s importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.

La conclusi—n es que la religi—n es muy peligrosa, si solamente estamos sirviendo a nosotros mismos, y no al Dios Sant’simo.

 

------------------------- Aplicaci—n -----------------------

 

En la historia del peregrino, hab’an dos hombres que caracterizaban el problema de este capitulo.  Uno era hip—crita, y el otro era formalismo.  Los dos terminaron mal.

 

Hip—crita es uno que tome el nombre de Cristo, que est‡ en pacto con Žl, tal vez aun toma la Santa Cena, pero su vida est‡ llena de la rebeld’a.  Quiere la reputaci—n de un Cristiano, pero con nada de las obligaciones.

 

El otro, formalismo, era muy semejante.  En el formalismo, uno es un Cristiano, formalmente, hasta asista a una iglesia, pero solamente para las apariencias.

 

Es que no tiene la menor interŽs en la palabra de Dios, y aun menos en obedecer la.  Y donde la predicaci—n es muy suave, siempre dulce, se pueden acumular muchos de estos.

 

ŔComo est‡ contigo, hermano, hermana, en esta noche?  ŔSabiendo que la Santa Cena viene en ocho d’as?

 

ŔEstas cayendo en esta trampa?  Te voy a dar una prueba muy f‡cil, para examinar a ti mismo.

 

pausa

 

ŔTomas tu en serio lo que Cristo dijo, o prefieres unas costumbres con que te sientes c—modo?

 

Cristo vino con mucha compasi—n por las personas perdidas, alejadas de Dios, y sin esperanza en el mundo.

 

ŔTienes tu algo de compasi—n para ellos, como los que muy pronto estar‡n alcanzando a los ni–os de la comunidad con la escuela b’blica de vacaciones?

 

Alcanzar a los perdidos es siempre un gran trabajo, fuera de tu zona de comodidad, tal vez.

 

Pero hablaba Cristo mucho de la necesidad de llevar el mensaje a otros.

 

 

Marcos 16:15-16 Y les dijo: Id por todo el mundo y

predicad el evangelio a toda criatura.

 

El que creyere y fuere bautizado, ser‡ salvo; mas el que no creyere, ser‡ condenado.

 

ŔTe importa lo que Cristo actualmente nos ha dicho?  ŔO tienes tu, tu propio concepto de quŽ es una vida Cristiana, mas c—moda, menos arriesgada?

 

Cristo hablaba mucho de la necesidad de hacer disc’pulos, tomando el tiempo para instruir a otros.  ŔEsto es algo que te interesa, o es esto tambiŽn fuera de tu zona de comodidad?

 

Mateo 28:18-20 Y Jesśs se acerc— y les habl— diciendo: Toda

potestad me es dada en el cielo y en la tierra.

 

Por tanto, id, y haced disc’pulos a todas las naciones, bautiz‡ndolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Esp’ritu Santo;  ense–‡ndoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aqu’ yo estoy con vosotros todos los d’as, hasta el fin del mundo. AmŽn.

 

No es muy complicado, entender lo que Cristo actualmente nos ha mandado, pero en las iglesias modernas, se han sustituido un sin fin de programas por la gran comisi—n de Cristo, programas en que te puedes sentir mas c—modo.

 

Es muy claro que Cristo nos llamaba a ser testigos de su verdad, pero esto es mayormente rechazado en la gran mayor’a de los hermanos modernos de este pa’s.

 

Hechos 1:6-8   Entonces los que se hab’an reunido le

preguntaron, diciendo: Se–or, Ŕrestaurar‡s el reino a Israel en este tiempo?

 

Para muchos, esto siempre ha sido su fascinaci—n, no en el trabajo, sino en adivinar si estamos en los śltimos de los śltimos d’as.  Pero Cristo sab’a c—mo corregir esto..

 

Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; pero recibirŽis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Esp’ritu Santo,

 

y me serŽis testigos en JerusalŽn, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo śltimo de la tierra.

 

ŔQuieres tu hermano, hermana vivir como uno que tome en serio los mandamientos de Cristo?  ŔO has encontrado tu rutina, ya, en que puedes repetir cierto ritmo de rituales, que pueden apaciguar tu conciencia, jam‡s saliendo de tu zona de comodidad?

 

Pero si tu prefieres una vida Cristiana llena de acci—n, llena de poder, llena del Esp’ritu Santo de Dios, teniendo un gran impacto en otros, puedes pasar en unos momentos, y oraremos para ti.

 

San Pablo dijo que en los postreros tiempos, habr’an personas en pacto con Dios que tendr’an una forma de piedad, pero sin la eficacia del Esp’ritu Santo.

 

2 Timoteo 3:1-5 TambiŽn debes saber esto: que en los

postreros d’as vendr‡n tiempos peligrosos.

 

Porque habr‡ hombres amadores de s’ mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, imp’os, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites m‡s que de Dios, que tendr‡n apariencia de piedad, pero negar‡n la eficacia de ella; a Žstos evita.

 

Pero hermano, hermana, si es tu deseo, vivir el tiempo corto que tenemos sobre esta tierra, con el poder triunfante, haciendo cosas grandes para el Se–or, y tocando las vidas de muchos, puedes pasar, en unos momentos y oraremos para ti.

 

Y no olvides, que cuando llegues al gran d’a del juicio, que Dios va a preguntar te a ti tambiŽn, mirando a todo tu vida de servicio..

Ŕ Lo Hiciste Para Mi?

 

Vamos a Orar