21 de julio de 18

La Misericordia Extendida

Isa’as 55:1-3

 

En un mundo de mucho sufrimiento, es normal pedir justicia, y clamar por un fin de la impunidad que deja a muchos malvados libres de las consecuencias de sus acciones.

 

Y el Dios verdadero, el Dios de la Biblia es un Dios de justicia.  Pero hay algo aun mas importante, mas urgente en la mente de Dios, y esto es la misericordia.

 

Y esto ya fue evidente, aun antes del tiempo de Cristo como te puedes ver en el libro de Isa’as..

 

Isa’as 55:1-3  A todos los sedientos: Venid a las aguas; y

los que no tienen dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche.

 

ŔPor quŽ gast‡is el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? O’dme atentamente, y comed del bien, y se deleitar‡ vuestra alma con grosura.

 

Inclinad vuestro o’do, y venid a m’; o’d, y vivir‡ vuestra alma; y harŽ con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David.

 

Escuchando esto por primera vez, parece un poco absurdo.  ŔComo puede uno comprar algo, sin gastar el dinero?  ŔSi algo realmente es bueno, como es posible que no tiene precio?

 

Isa’as 55:1    A todos los sedientos: Venid a las aguas; y

los que no tienen dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche.

 

La llamada est‡ en seria.  Y aunque no hay precio para ti, mi amigo, hab’a un gran precio, y este precio ha sido pagado por medio de otro.  El precio fue pagado en sangre en la cruz de calvario hace casi 2020 a–os.

 

Y la misericordia, verdadera est‡ en este momento, extendida a ti, amigo, se–ora, Joven.

 

Isa’as 55:1-3  A todos los sedientos: Venid a las aguas; y

los que no tienen dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche.

 

ŔPor quŽ gast‡is el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? O’dme atentamente, y comed del bien, y se deleitar‡ vuestra alma con grosura.

 

Inclinad vuestro o’do, y venid a m’; o’d, y vivir‡ vuestra alma; y harŽ con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David.

 

La llamada es para los que ya tienen sed, no de este mundo y sus frustraciones, sino que se tienen sed de algo mejor.

 

Las personas llamadas, ya han probado los ’dolos de este mundo como la riqueza sobre todo, o el sexo il’cito, o el robo, o el poder, y han descubierto que al fin y al cabo, nada de esto puede satisfacer sus almas.

 

Es como que han gastado el dinero de su tiempo, de su juventud en algo que no puede saciar.

 

ŔPor quŽ gast‡is el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? O’dme atentamente, y comed del bien, y se deleitar‡ vuestra alma con grosura.

 

Inclinad vuestro o’do, y venid a m’; o’d, y vivir‡ vuestra alma; y harŽ con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David.

 

Algo sumamente valioso est‡ extendido, ofrecido aqu’.  Y es algo duradero, que jam‡s puede perder su valor.  Es un pacto, un pacto eterno, de las misericordias firmes como las que Dios promet’a a David.

 

Y la salvaci—n del alma, solamente puede venir por estas misericordias.

 

Tito 3:4-5 Pero cuando se manifest— la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres, nos salv—, no por obras de justicia que nosotros hubiŽramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneraci—n y por la renovaci—n en el Esp’ritu Santo.

La salvaci—n del alma no est‡ a la venta, sino que est‡ ofrecida gratuitamente.  El hombre jam‡s ser‡ redimido por sus buenas obras.

 

Efesios 2:8-9  Porque por gracia sois salvos por medio de

la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se glor’e.

 

Si el hombre pudiera ganar la salvaci—n de su alma con las buenas obras, seria muy exaltado en su ego.  Por esto dice

no por obras, para que nadie se glor’e.

 

Pero esto no quiere decir que los redimidos van a seguir viviendo en los pecados groseros, sino que cuando la misericordia entra, el coraz—n est‡ transformado.

 

Por esto Isa’as dice en el mismo contextoÉ

 

Isa’as 55:6-7  Buscad a Jehov‡ mientras puede ser hallado,

llamadle en tanto que est‡ cercano.

 

Deje el imp’o su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuŽlvase a Jehov‡, el cual tendr‡ de Žl misericordia, y al Dios nuestro, el cual ser‡ amplio en perdonar.

 

Antes que nada, la oferta es urgente.  Dice ŇBuscad a Jehov‡ mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que est‡ cercanoÓ.

 

Es posible que Dios est‡ cerca de ti, hoy d’a mandando te una llamada por medio de su palabra.  Pero si tu, amigo sigues demorando, rechazando la llamada, no hay garant’a de que ser‡ abierta mas tarde.

 

Y para el que ya ha probado los delitos, los placeres de este mundo y ha descubierto que todo lo que el mundo te ofrece es vanidad de vanidades, ser‡ tu deseo de agarrar algo mejor, algo duradero.

 

Deje el imp’o su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuŽlvase a Jehov‡, el cual tendr‡ de Žl misericordia, y al Dios nuestro, el cual ser‡ amplio en perdonar.

 

 

 

 

Amigo, si vienes ya, aun tarde en tu vida, habiendo hecho mucho en contra de la Santa Ley de Dios, Dios va a recibir te.

 

Y tal vez esto parece imposible para ti.  Tal vez pienses que lo que has hecho es demasiado.  Pero no olvide, el precio de tus pecados ha sido pagado por otro, por la sangre de Cristo Jesśs, en la cruz de calvario, si solamente te puedes creer.

 

Y no importa si tu mente no puede entender esto ahora, porque dice Dios en el mismo contexto de Isa’as É

 

Isa’as 55:8-9  Porque mis pensamientos no son vuestros

pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehov‡.

 

Como son m‡s altos los cielos que la tierra, as’ son mis caminos m‡s altos que vuestros caminos, y mis pensamientos m‡s que vuestros pensamientos.

 

Aun si esto no tiene sentido para ti ahora, tenemos la garant’a de que esto s’ tiene sentido a Dios.

 

Y esa palabra, esa promesa de la misericordia est‡ saliendo en todas partes del mundo, salvando a algunos y dejando otros, aun mas duros en su rebeli—n.  Porque amigo, la palabra de Dios no puede fracasar.

 

Isa’as 55:10-11 Porque como desciende de los cielos la

lluvia y la nieve, y no vuelve all‡, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come,

 

as’ ser‡ mi palabra que sale de mi boca; no volver‡ a m’ vac’a, sino que har‡ lo que yo quiero, y ser‡ prosperada en aquello para que la enviŽ.

 

La palabra de Dios tiene un poder infinito, y anda abriendo los corazones de algunos, y haciendo otros, duros como el diamante.   Por esto yo tengo que continuar con la oferta porque !!ay de m’ si no anunciare el evangelio!

 

 

 

Isa’as 55:1-3  A todos los sedientos: Venid a las aguas; y

los que no tienen dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche.

 

ŔPor quŽ gast‡is el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? O’dme atentamente, y comed del bien, y se deleitar‡ vuestra alma con grosura.

 

Inclinad vuestro o’do, y venid a m’; o’d, y vivir‡ vuestra alma; y harŽ con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David.

 

Isa’as 55:6-7  Buscad a Jehov‡ mientras puede ser hallado,

llamadle en tanto que est‡ cercano.

 

Deje el imp’o su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuŽlvase a Jehov‡, el cual tendr‡ de Žl misericordia, y al Dios nuestro, el cual ser‡ amplio en perdonar.

 

Y no te enga–es amigo, el arrepentimiento es mucho mas que simplemente decir ŇLo sientoÓ a tu diosito.

 

Como dijo el sabio Salom—n.

Proverbios 28:13     El que encubre sus pecados no

prosperar‡; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzar‡ misericordia.

 

Y amigo, si ahora est‡s harto de los enga–os, las mentiras, y las frustraciones de las promesas falsas de este mudo, Dios te est‡ invitando a algo mejor.

 

Dios est‡ invitando te a algo que realmente puede satisfacer tu alma.  Y Cristo Jesśs est‡ confirmando el mismo diciendoÉ

 

Mateo 11:28-30 Venid a m’ todos los que est‡is trabajados y

cargados, y yo os harŽ descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros y aprended de m’, que soy manso y humilde de coraz—n, y hallarŽis descanso para vuestras almas, porque mi yugo es f‡cil y ligera mi carga.

 

Y si esto te interesa, estamos aqu’ para hablar contigo, y para orar por tu recepci—n de la misericordia extendida.

ÁAmen!