7 de abril de 18

La Fe De Los Demonios

Santiago 2:19

 

Muchos hermanos Cristianos, acaban de pasar una semana, o mas recordando el gran amor que Dios mostr—, mandando su hijo para morir por los pecados de muchos.

 

Y en las iglesias evangŽlicas, se toman en serio, el hecho de que la salvaci—n que Cristo compr— en la cruz con su sangre, es un don gratuito, recibido por la fe.

 

La fe B’blica es muy clara, declarando que ningśn hombre est‡ salvado por sus  propios meritos.

 

Efesios 2:8-10 Porque por gracia sois salvos por medio de

la fe; y esto no de vosotros, pues es don de

Dios; no por obras, para que nadie se

glor’e.

 

Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesśs para buenas obras, las cuales Dios prepar— de antemano para que anduviŽsemos en ellas.

 

Siendo un don gratuito, nuestro mensaje tom— el nombre de evangelio, o sea, la buena nueva.

 

Romanos 6:23   Porque la paga del pecado es muerte, mas la

d‡diva de Dios es vida eterna en Cristo Jesśs Se–or nuestro.

 

Y cuando uno ha recibido ese don, es evidente porque su vida est‡ transformada por medio del Esp’ritu Santo.

 

2 Corintios 5:17     De modo que si alguno est‡ en Cristo,

nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aqu’ todas son hechas nuevas.

 

Con ese regalo del nuevo nacimiento, las iglesias primitivas empezaron a crecer r‡pidamente, y avanzar a las ciudades de Europa, y al norte de la çfrica.

 

Pero en poco tiempo el enemigo vino atacando con sus enga–os y sus mentiras.  El diablo vino convenciendo a muchos que eran bien ya, que ya ten’an ese don de la salvaci—n, cuando ni han cre’do de veras.

Y desafortunadamente, el mismo problema est‡ con nosotros hoy d’a.  Te puedes ver personas de casi cada denominaci—n Cristiana que dicen que ya creen, pero la evidencia de sus vidas prueban el contrario.

 

Se ve personas que se llaman Cristianos pero vivan como personas dedicadas a este mundo.  Por esto, Santiago tenia que decir a personas de las iglesias...

 

Santiago 4:4   !!Oh almas adślteras! ŔNo sabŽis que la

amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.

 

Y en la iglesia de los Corintios, san Pablo tenia que estar aun mas explicito proclamandoÉ

 

1 Corintios 6:9-10   ŔNo sabŽis que los injustos no

heredar‡n el reino de Dios? No errŽis; ni los fornicarios, ni los id—latras, ni los adślteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredar‡n el reino de Dios.

 

Y aqu’ Pablo no estaba diciendo que uno tiene que merecer su salvaci—n por el medio de sus propias fuerzas, sino que hab’a un peligro de pensar que uno ha recibido ese don divino, cuando realmente, solamente ha recibido un enga–o.

 

El ap—stol Juan observaba el mismo comentandoÉ

 

1 Juan 2:4 El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus

mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no est‡ en Žl.

 

Oh amigo precioso, la fe verdadera, la fe salvadora es mucho mas que simplemente levantar tu mano en una reuni—n evangŽlica, es mas que simplemente hacer una oraci—n, o tomar una decisi—n, la fe verdadera, la fe salvadora cuando viene va a producir cambios radicales en tu vida.

 

Cristo mismo dio advertencias de que habr’an personas tristemente sorprendidas cuando vino el d’a del juicio.

 

 

 

Mateo 7:21-23  No todo el que me dice: Se–or, Se–or,

entrar‡ en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que est‡ en los cielos.

 

Muchos me dir‡n en aquel d’a: Se–or, Se–or, Ŕno profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?  Y entonces les declararŽ: Nunca os conoc’; apartaos de m’, hacedores de maldad.

 

Cristo no dijo que habr’an unos cuantos cayendo en ese error desastroso, sino muchos.  Y por esto hay mucha doctrina B’blica en el nuevo testamento dada para ojala sacar unos de sus enga–os profundos, tocante al estado de sus almas.

 

En otro lugar el aposto Santiago dijo.

 

Santiago 2:19  Tś crees que Dios es uno; bien haces.

TambiŽn los demonios creen, y tiemblan.

 

Por lo menos los demonios tiemblan.   Hoy en d’a te puedes observar muchos hermanos, hermanas de la fe, que andan con el mundo, viviendo en la vanidad, y no sientan nada del temor.

 

Santiago 2:19  Tś crees que Dios es uno; bien haces.

TambiŽn los demonios creen, y tiemblan.

 

Ese verso nos ense–a que una fe que no funciona, no trabaja, y por lo tanto es una fe falsa que no puede salvar.

 

Amigo, hasta los demonios creen que hay un Dios, y reconocen que es uno, pero esto no va a ayudar les a escapar del infierno.

 

La fe verdadera es un don, es un don gratuita, pero cuando recibes ese don, descubrir‡s que es una fe activa, una fe viva una fe arrepentida y una fe obediente.

 

Hay muchos, lastimosamente, que han entrado en las iglesias por la puerta equivocada, y ahora caminan por el camino enga–oso, Cristo mismo nos dio la advertencia.

 

 

 

Mateo 7:13-14  Entrad por la puerta estrecha; porque ancha

es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdici—n, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.

 

Y muchos hermanos deben de examinar a ellos mismos, para ver si realmente est‡n en la fe, os si tal vez, ellos mismos han sido enga–ados.

 

Si esto no era un problema actual, no habr’a tantas escrituras para descubrir y corregir lo.

 

Cristo salio con ostros anuncios fuertes para sacar a los hermanos de sus enga–os.

 

Mateo 16:24-25 Entonces Jesśs dijo a sus disc’pulos: Si

alguno quiere venir en pos de m’, niŽguese a s’ mismo, y tome su cruz, y s’game.

 

Porque todo el que quiera salvar su vida, la perder‡; y todo el que pierda su vida por causa de m’, la hallar‡.

 

Cuando uno tiene la fe salvadora, la fe verdadera, no se va a pensar que es demasiado, negar a si mismo para seguir a Cristo.  Ser‡ normal romper se con las vanidades de este mundo para seguir el Se–or de la Gloria.

 

En el libro de Hebreos, es claro que la fe verdadera va a producir una cierta santidad en los que la tiene.

 

Hebreos 12:14 Seguid la paz con todos, y la santidad,

sin la cual nadie ver‡ al Se–or.

 

Otro gran enga–o reconocido bajo ese tema es los que saben que andan lejos de Dios, en su carnalidad o en sus vicios, y piensan que habr‡ tiempo mas tarde para corregir esto.  Pero esto es otro enga–o peligroso.

 

2 Corintios 6:2 Porque dice: En tiempo aceptable te he

o’do, Y en d’a de salvaci—n te he socorrido.

He aqu’ ahora el tiempo aceptable; he aqu’

ahora el d’a de salvaci—n.

 

Oh amigo no juegues, no tires los suertes, en los asuntos de tu alma.

 

En otra parte dice.

 

Hebreos 3:15   Si oyereis hoy su voz, No endurezc‡is

vuestros corazones.

 

En gran amor, Cristo salio con muchas advertencias sobre ese peligro, en el 13 de Lucas dijo..

 

Lucas 13:24-28 Esforzaos a entrar por la puerta angosta;

porque os digo que muchos procurar‡n entrar, y no podr‡n.

 

DespuŽs que el padre de familia se haya levantado y cerrado la puerta, y estando fuera empecŽis a llamar a la puerta, diciendo: Se–or, Se–or, ‡brenos, Žl respondiendo os dir‡: No sŽ de d—nde sois.

 

Entonces comenzarŽis a decir: Delante de ti hemos comido y bebido, y en nuestras plazas ense–aste.

 

Pero os dir‡: Os digo que no sŽ de d—nde sois; apartaos de m’ todos vosotros, hacedores de maldad.

 

All’ ser‡ el llanto y el crujir de dientes, cuando ve‡is a Abraham, a Isaac, a Jacob y a todos los profetas en el reino de Dios, y vosotros estŽis excluidos.

 

ŔOh, amigo precioso, que forma de fe tienes tu?  Es una fe salvadora, es una fe arrepentida, es una fe santa, o es una fe de demonios.

 

Santiago 2:19  Tś crees que Dios es uno; bien haces.

TambiŽn los demonios creen, y tiemblan.

 

Oh amigo, si realmente no hay temor de Dios en tu vida, si puedes jugar con la inmoralidad sexual, el vicio u otros delitos sin que tu conciencia te molesta, es posible que est‡s en gran peligro, y hay hermanos aqu’ dispuestos a orar contigo, y orientar te en la verdad.

 

Amen