1 de julio de 17
Amando La Muerte
Proverbios 8:34-36
Por medio de las santas escrituras, te puedes saber lo que realmente
es bueno o malo. Aparte de la luz
de Dios, nadie realmente sabe.
Cada cual puede tener su opini—n, o sus preferencias personales, pero
no hay manera de establecer lo que es correcto, o malo con autoridad.
Unos dicen que el estado decidir‡, pero los estados del mundo han cometido
grandes atrocidades. Casi todos
est‡n de acuerdo de que el estado puede imponer leyes injustas, Ŕpero como van
a saber lo que es justo o injusto, si solamente tenemos opiniones y
preferencias.
Esto es un problema grave en nuestros tiempos en que hay mas y mas
maldad. Las culturas se mueven en
la direcci—n de la destrucci—n y la muerte, porque no hay una base de sabidur’a
confiable.
Pero es aun peor, en la Biblia, la sabidur’a misma estaba hablando, y
diciendo que abandonando la sabidur’a divina, la gente terminan, amando la muerte.
Proverbios 8:34-36 Bienaventurado el hombre que me
escucha, Velando a mis puertas cada d’a, Aguardando a los postes de mis
puertas.
Porque el que me halle, hallar‡ la vida, Y alcanzar‡ el favor de
Jehov‡.
Mas el que peca contra m’, defrauda su alma; Todos los que me
aborrecen aman la muerte.
Esto es algo que va a encantar al diablo porque el tambiŽn est‡
dedicado a la muerte y la confusi—n.
Como dijo Cristo JesśsÉ
Juan 10:10 El
ladr—n no viene sino para hurtar y matar
y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en
abundancia.
Amigo si tu est‡s bien entregado a los caminos, a los pensamientos de
este mundo, lejos del evangelio de Cristo, es muy posible que ya est‡s cayendo
bajo el poder del diablo, aun sin saber lo.
2 Corintios 4:3-4 Pero
si nuestro evangelio est‡ aśn
encubierto, entre los que se pierden est‡ encubierto; en los cuales el
dios de este siglo ceg— el entendimiento de los incrŽdulos, para que no les
resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen
de Dios.
Amigo es posible que est‡s cayendo mas y mas en la oscuridad del
diablo, pero Dios te est‡ llamando hoy, por medio de su palabra. No desprecias su luz.
Juan 3:16-19 Porque
de tal manera am— Dios al mundo, que
ha dado a su Hijo unigŽnito, para que todo aquel que en Žl cree, no se
pierda, mas tenga vida eterna.
Porque no envi— Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino
para que el mundo sea salvo por Žl.
El que en Žl cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido
condenado, porque no ha cre’do en el nombre del unigŽnito Hijo de Dios.
Y esta es la condenaci—n: que la luz vino al mundo, y los hombres
amaron m‡s las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas.
La Biblia habla de personas que no solamente aman a la muerte, que aman
el pecado, sino aman la oscuridad.
Y a veces hay j—venes que burlan de todo esto riendo, pero tienen que
entender que hay una muerte segunda.
Apocalipsis 20:14 Y
la muerte y el Hades fueron lanzados
al lago de fuego. Esta es la muerte segunda.
Amigo, en la palabra de Dios, la muerte no es algo chistoso, sino que
es algo sucio, feo.
La muerte no es tu amigo, sino que es tu enemigo.
Y peor que todo es la muerte segunda.
Apocalipsis 21:8 Pero
los cobardes e incrŽdulos, los
abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los id—latras y
todos los mentirosos tendr‡n su parte en el lago que arde con fuego y azufre,
que es la muerte segunda.
Amigo Cristo hoy d’a est‡ llamando te a algo mejor. Cristo pag— con su muerte, con su sangre, para dar a ti un escape de
la muerte para siempre. Pero esto
no ser‡ tuya, si sigues en el amor del pecado, amando la oscuridad, enamorado
con la muerte. La sabidur’a hablandoÉ
Proverbios 8:34-36 Bienaventurado el hombre que me
escucha, Velando a mis puertas cada d’a, Aguardando a los postes de mis
puertas.
Porque el que me halle, hallar‡ la vida, Y alcanzar‡ el favor de
Jehov‡.
Mas el que peca contra m’, defrauda su alma; Todos los que me aborrecen
aman la muerte.
Amigo el ser humano ha merecido la muerte por su amor por el pecado.
Romanos 6:23 Porque
la paga del pecado es muerte, mas la
d‡diva de Dios es vida eterna en Cristo Jesśs Se–or nuestro.
Si tu, amigo has pagado por el aborto de una amante, entonces eres un
asesino, y mereces la muerte por ese asesino, es mas mereces la muerte segunda
en el lago de fuego.
El asesino es un crimen aborrecible en los ojos de Dios.
Pero aun si no has matado a un bebe inocente, pero has vivido en el
odio, es posible que eres un asesino, en los ojos de Dios.
1 Juan 3:15 Todo
aquel que aborrece a su hermano es
homicida; y sabŽis que ningśn homicida tiene vida eterna permanente en
Žl.
Pero esto tiene remedio en la sangre de Cristo Jesśs.
Tal vez te parece extra–o hablar de la sangre de alguien que muri— ya
hace 2000 a–os, pero la doctrina B’blica nos ense–a que por medio de la muerte
de ese hombre, hay salvaci—n para muchos.
Ese hombre era Dios en carne.
Mateo 20:28 Como
el Hijo del Hombre no vino para ser
servido, sino para servir, y para dar
su
vida en rescate por muchos.
La Santa Ley de Dios o exige una obediencia perfecta o exige la
muerte. Pero Cristo pag— las dos
cosas. Cristo viv’a una vida
perfecta, pero tambiŽn pag— con su muerte.
Y por esto ser‡ perfectamente justo, de parte de Dios, salvar a ti,
eternamente por medio de la muerte de otro.
1 Pedro 2:24 Quien
llev— Žl mismo nuestros pecados en su
cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los
pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados.
Amigo, si sigues viviendo, amando el pecado, vas a descubrir que estas
en un callej—n sin salida.
No solamente en la vida venidera, sino en esta vida ahora, pagar‡s mas
y mas por tus propios pecados, si sigues lejos de Cristo.
G‡latas 6:7-8 No os
enga–Žis; Dios no puede ser burlado:
pues todo lo que el hombre sembrare, eso tambiŽn segar‡.
Porque el que siembra para su carne, de la carne segar‡ corrupci—n;
mas el que siembra para el Esp’ritu, del Esp’ritu segar‡ vida
eterna.
Oh amigo, trate de entender, que estamos aqu’, gastando nuestro tiempo
precioso, solamente tratando de persuadir te a abandonar tu amor por la muerte.
Proverbios 8:34-36 Bienaventurado el hombre que me
escucha, Velando a mis puertas cada d’a, Aguardando a los postes de mis
puertas.
Porque el que me halle, hallar‡ la vida, Y alcanzar‡ el favor de
Jehov‡.
Mas el que peca contra m’, defrauda su alma; Todos los que me
aborrecen aman la muerte.
El pecado es sumamente enga–oso.
El pecado puede ofrecer te mucho por un rato, pero despuŽs, vas a
descubrir que el costo era demasiado alto. Trate de aprender algo del gran MoisŽs que estaba en la
posici—n de disfrutar el pecado mucho.
Hebreos 11:24-27 Por
la fe MoisŽs, hecho ya grande,
rehus— llamarse hijo de la hija de Fara—n, escogiendo antes ser
maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del
pecado,
teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros
de los egipcios; porque ten’a puesta la mirada en el galard—n.
Por la fe dej— a Egipto, no temiendo la ira del rey; porque se sostuvo
como viendo al Invisible.
La Biblia reconoce que el pecado puede ofrecerte ciertos deleites
temporales por una temporada. Pero
cuando viene la cuenta, y tienes que pagar por tus transgresiones, te
descubrir‡s que todo ha sido un robo, robando te de tu futuro, robando te de tu
felicidad y sobre todo, robando te de tu alma.
Proverbios 8:34-36 Bienaventurado el hombre que me
escucha, Velando a mis puertas cada d’a, Aguardando a los postes de mis
puertas.
Porque el que me halle, hallar‡ la vida, Y alcanzar‡ el favor de
Jehov‡.
Mas el que peca contra m’, defrauda su alma; Todos los que me
aborrecen aman la muerte.
Oh, amigo, si tienes o’dos para o’r, si te puedes pensar un poco en tu
propio futuro, hay personas aqu’ que pueden orar y hablar contigo.
No es necesario continuar viviendo en el amor por el pecado, el amor
por la oscuridad, en el amor por la muerte. AcuŽrdate la promesa de CristoÉ
Juan 10:10 El
ladr—n no viene sino para hurtar y matar
y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en
abundancia.
Esc‡pate ya de la tiran’a de Satan‡s - ÁAmen!