10 de marzo de 17

Contento Con Dios

Salmos 145:1-21

 

Hemos visto ya muchos salmos sobre las luchas, las oraciones de David cando estaba pasando por diferentes aflicciones.

 

Hasta en el ultimo estudio, como en muchos se promet’a alabar despuŽs por la ayuda recibida.

 

Salmos 144:9   Oh Dios, a ti cantarŽ c‡ntico nuevo;

               Con salterio, con decacordio cantarŽ a ti.

 

Y en el salmo de hoy, realmente estar‡ cumpliendo su promesa, porque el salmo de hoy no es de peticiones ni de luchas, sino de pura alabanza y adoraci—n.

 

1) Te exaltarŽ, mi Dios, mi Rey, y bendecirŽ tu nombre eternamente y para siempre.

 

Para muchos, nuevos en la fe, o dŽbiles en su esp’ritu, el tiempo de alabanza est‡ bien, pero despuŽs de un rato se cansan, y est‡n dispuestos a ir a otra cosa.  pausa

 

Pero David aqu’ estaba tan contento con su Dios, que se sent’a el deseo de continuar su alabanza para siempre, sin interrupci—n alguna.

 

Es que estudiando su Dios, y viviendo en relaci—n con Žl, se empez— a conocer mas y mas de los atributos de su Se–or.  Pero aun aprendiendo por toda la vida, estaba enterado de que jam‡s ser’a posible entender todo sobre ese gran ser, como dijo San Pablo en el libro de Romanos.

 

Romanos 11:33  !!Oh profundidad de las riquezas de la

sabidur’a y de la ciencia de Dios! !!Cu‡n insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos!

 

Uno que est‡ contento con su Dios, puede estar muy emocionado hablando de Žl, como los mundanos cuando se hablan de sus equipos favoritos de los deportes, o de sus grupos favoritos de mœsica en un gran concierto mundano.

 

2) Cada d’a te bendecirŽ, y alabarŽ tu nombre eternamente y para siempre.

Y hizo la promesa dos veces, de que iba a alabar cada d’a, no solamente en domingo, sino que no pudo cumplir un solo d’a sin dar alabanza a su Dios, que era tan digo.

 

Y n—talo, David no hizo esto por lo que pudo sacar de su Dios.  Ya despuŽs de muchos a–os de relaci—n David entend’a que Dios siempre seria su padre, que Dios siempre suplir’a sus necesidades.

 

Pero David alababa a Dios por quien es, porque es tan digno, porque Dios merece la alabanza siendo tan excelente en su naturaleza.

 

3) Grande es Jehov‡, y digno de suprema alabanza; y su grandeza es inescrutable.

 

Esta es la secunda vez que hemos visto la palabra ÒinescrutableÓ en el mensaje de hoy.  Es que Dios tiene un plan, un gran plan, y todo lo que quiere cumplir, est‡ cumpliendo. 

 

Jam‡s ha perdido el control de su creaci—n.  Puede permitir muchos seres vivir sus vidas, tomando sus decisiones, buenas o malas, y al mismo tiempo prometer a sus hijos, que todo lo que pasa es para su bien.

 

Romanos 8:28   Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las

cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su prop—sito son llamados.

 

ÀPero como puede hacer esto?  ÀC—mo puede controlar todo lo que pasa y al mismo tiempo dejar que los hombres escojan libremente?

 

Efesios 1:11   En Žl asimismo tuvimos herencia, habiendo sido

predestinados conforme al prop—sito del que hace todas las cosas segœn el designio de su voluntad.

 

Dios ya tiene su plan, y nada puede alterar ese gran plan, pero al mismo tiempo Dios est‡ escuchando, y contestando las oraciones de sus hijos.  Esto es inescrutable.  Pero es verdad.

 

4) Generaci—n a generaci—n celebrar‡ tus obras, y anunciar‡ tus poderosos hechos.

 

 

Para muchos perdidos en nuestros tiempos no hay nada segura, no ha nada sobre que se pueden realmente depender.  Todo est‡ cambiando para ellos, sus amigos, su moralidad, su prop—sito de vivir.

 

Si creen algo, no hay manera de saber si sus creencias son ver’dicas o solamente sus preferencias personales, que pueden cambiar en cualquier momento.

 

Pero la verdad de nuestras creencias est‡n ancladas en la eternidad.

 

4) Generaci—n a generaci—n celebrar‡ tus obras, y anunciar‡ tus poderosos hechos.

 

Para nosotros, lo que pas— en la historia es relevante y es importante.  Los pecados de Ad‡n y Eva tienen su impacto.  El diluvio de NoŽ, como historia, no como mito, explique mucho.

 

La vida de JosŽ en Egipto, o el Žxodo con MoisŽs, o hasta la vida de David, quien escribi— este salmo, puede informar nos, sobre c—mo es nuestro Dios.

 

A veces en los estudios de gŽnesis hacemos la pregunta tramposa, ÀPuedes tu nombrar un animal prehist—rico?

 

Y entrenados por los mundanos muchos contestan con los dinosaurios.  Pero para nosotros estos animales majestuosos no eran prehist—ricos, porque nosotros tenemos detalles sobre la creaci—n empezando con el primer d’a. 

 

Nuestro Dios es tan majestuoso, que no solamente hizo todo lo que existe, empezando con nada, pero nos dio una revelaci—n sobre muchos de los detalles relevantes.  No estamos en la oscuridad.

 

5) En la hermosura de la gloria de tu magnificencia, y en tus hechos maravillosos meditarŽ.

 

Los que realmente vivan cerca de su Dios, van a estudiar estos detalles.  Van a meditar en lo que Dios ha revelado en su palabra, van a meditar en la historia de la iglesia, y en lo que est‡ haciendo por medio de los misioneros en muchas partes del mundo ahora.

 

Las cosas de Dios jam‡s van dejar de interesar el hermano que camina en serio con su Dios.  Jam‡s va a responder como gente que estudian otros temas.

Jam‡s va a decir, ÒO si, yo estuve estudiando las escrituras y los caminos de Dios por un rato, pero ya aprend’ casi todo, y realmente no hay nada nuevo que no he escuchado.Ó

 

Los que caminan cerca de su Dios pueden sacar nueva material de versos que han conocido ya por muchos a–os ya.

 

Es mas, la Biblia es un libro bastante grande.  Muchos Cristianos jam‡s han le’do todo.  Y aun menos pueden decir que han aprendido todo lo que han le’do.  Es inagotable.

 

5) En la hermosura de la gloria de tu magnificencia, y en tus hechos maravillosos meditarŽ.

 

Y un hermano en serio no est‡ solamente aprendiendo de las escrituras, sino de su vida con el Se–or, lo que hace en las vidas de sus hijos, o de sus nietos.

 

Siempre hay nuevas sorpresas, nuevas ‡reas de investigaci—n.

 

6) Del poder de tus hechos estupendos hablar‡n los hombres,

Y yo publicarŽ tu grandeza.

 

Es correcto para los hermanos hablar pœblicamente de la bondad de Dios.  Esto es parte de la raz—n de los testimonios que tenemos en los viernes.

 

San Pablo estaba siempre hablando de su testimonio delante de reyes y de personas de gran influencia.

 

Hasta uno que fue librado de un demonio, y despuŽs deseaba seguir con los disc’pulos de Cristo, fue mandado a dar testimonio a sus familiares, como la tarea mas urgente.

 

Marcos 5:1-20  Vinieron al otro lado del mar, a la regi—n de

               los gadarenos.  Y cuando sali— Žl de la barca,

en seguida vino a su encuentro, de los sepulcros, un hombre con un esp’ritu inmundo,

que ten’a su morada en los sepulcros, y nadie pod’a atarle, ni aun con cadenas.

 

Porque muchas veces hab’a sido atado con grillos y cadenas, mas las cadenas hab’an sido hechas pedazos por Žl, y desmenuzados los grillos; y nadie le pod’a dominar. Y siempre, de d’a y de noche, andaba dando voces en los montes y en los sepulcros, e hiriŽndose con piedras.

 

Cuando vio, pues, a Jesœs de lejos, corri—, y se arrodill— ante Žl.  Y clamando a gran voz, dijo: ÀQuŽ tienes conmigo, Jesœs, Hijo del Dios Alt’simo? Te conjuro por Dios que no me atormentes.

 

Porque le dec’a: Sal de este hombre, esp’ritu inmundo.  Y le pregunt—: ÀC—mo te llamas? Y respondi— diciendo: Legi—n me llamo; porque somos muchos.

 

Y le rogaba mucho que no los enviase fuera de aquella regi—n.  Estaba all’ cerca del monte un gran hato de cerdos paciendo.

 

Y le rogaron todos los demonios, diciendo: Env’anos a los cerdos para que entremos en ellos.

 

Y luego Jesœs les dio permiso. Y saliendo aquellos esp’ritus inmundos, entraron en los cerdos, los cuales eran como dos mil; y el hato se precipit— en el mar por un despe–adero, y en el mar se ahogaron.

 

Y los que apacentaban los cerdos huyeron, y dieron aviso en la ciudad y en los campos. Y salieron a ver quŽ era aquello que hab’a sucedido.

 

Vienen a Jesœs, y ven al que hab’a sido atormentado del demonio, y que hab’a tenido la legi—n, sentado, vestido y en su juicio cabal; y tuvieron miedo.   Y les contaron los que lo hab’an visto, c—mo le hab’a acontecido al que hab’a tenido el demonio, y lo de los cerdos.

 

Y comenzaron a rogarle que se fuera de sus contornos.  Al entrar Žl en la barca, el que hab’a estado endemoniado le rogaba que le dejase estar con Žl.

 

Mas Jesœs no se lo permiti—, sino que le dijo: Vete a tu casa, a los tuyos, y cuŽntales cu‡n grandes cosas el Se–or ha hecho contigo, y c—mo ha tenido misericordia de ti.

 

Y se fue, y comenz— a publicar en Dec‡polis cu‡n grandes cosas hab’a hecho Jesœs con Žl; y todos se maravillaban. 

 

Fue correcto para ese hombre, una vez libre de su demonio, no ir con Cristo inmediatamente a nuevos lugares, sino regresar a los suyos, proclamando la grandeza de Dios, de Cristo, por su gran misericordia, dando le la libertad de algo tan espantoso.

 

El punto es, que es importante vivir proclamando la grandeza de tu Dios.

 

7) Proclamar‡n la memoria de tu inmensa bondad, y cantar‡n tu justicia.

 

Dios es bondadoso y justo al mismo tiempo.  ÀPero como puede ser?

 

ƒxodo 34:6-7   Y pasando Jehov‡ por delante de Žl, proclam—:

!!Jehov‡! !!Jehov‡! fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad; que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la rebeli—n y el pecado, y que de ningœn modo tendr‡ por inocente al malvado; que visita la iniquidad de los padres sobre los hijos y sobre los hijos de los hijos, hasta la tercera y cuarta generaci—n.

 

Esto parece un poco contradictorio, que Dios es justo y misericordioso al mismo tiempo, hasta que te reflexiones en como, para dar la misericordia, siempre hay un sustituto, pagando por el pecado de los redimidos.

 

Esto estaba visible desde muy temprano en la historia, cuando Abraham estaba dispuesto a ofrecer a su hijo querido como sacrificio.

 

GŽnesis 22:6-8 Y tom— Abraham la le–a del holocausto, y la

puso sobre Isaac su hijo, y Žl tom— en su mano el fuego y el cuchillo; y fueron ambos juntos.

Entonces habl— Isaac a Abraham su padre, y dijo: Padre m’o. Y Žl respondi—: Heme aqu’, mi hijo. Y Žl dijo: He aqu’ el fuego y la le–a; mas Àd—nde est‡ el cordero para el holocausto?

 

 

Y respondi— Abraham: Dios se proveer‡ de cordero para el holocausto, hijo m’o. E iban juntos.

 

Abraham no sabia exactamente c—mo esto iba a terminar, pero caminaba en fe, y efectivamente Dios produc’a un animal en el ultimo momento.

 

Pero era profŽtico, anunciando que tu y yo no ’bamos a quemar para nuestras propias ofensas, sino que Dios iba a presentar un sustito para nosotros, y esto era la obra de Cristo en la cruz.  Y de esto podemos alabar para siempre, Dios mostrando su bondad y su justicia, al mismo tiempo.

 

Salmos 85:10   La misericordia y la verdad se encontraron;

La justicia y la paz se besaron.

 

8-9) Clemente y misericordioso es Jehov‡, lento para la ira, y grande en misericordia.  Bueno es Jehov‡ para con todos, y sus misericordias sobre todas sus obras.

 

Aqu’ dice que Dios no es solamente bueno con sus hijos, sino con los animales, d‡ndoles su comida.  Dios es bueno hasta con los malvados.  En vez de echar los en el infierno, que es su lugar merecido, se reciban muchas oportunidades de escuchar el evangelio, y recapacitar, rindiendo se a Cristo.

 

Y aun si ellos rechazan todo, en su perversidad, Dios es bondadoso en la prolongaci—n de sus vidas.

 

Mateo 5:44-45  Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos,

bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que se‡is hijos de vuestro Padre que est‡ en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.

 

Aun los injustos pueden disfrutar sus amigos, la buena comida, sus esposas o sus amantes.  Pueden recibir por muchos a–os las bondades de Dios, antes de tomar su cama merecida en las llamas del infierno.

 

Lucas 16:19    Hab’a un hombre rico, que se vest’a de pœrpura

               y de lino fino, y hac’a cada d’a banquete con

               esplendidez.

 

 

Ese hombre sin misericordia disfrutaba muchos de las bendiciones de Dios, en esta vida, antes de empezar a rogar por una gota de agua, para su lengua quemada.

 

10-12) Te alaben, oh Jehov‡, todas tus obras, y tus santos te bendigan.  La gloria de tu reino digan, y hablen de tu poder,

Para hacer saber a los hijos de los hombres sus poderosos hechos, y la gloria de la magnificencia de su reino.

 

Hay muchos animales que son felices en sus vidas, hay animales mascotas que son felices viviendo con los seres humanos.  Y aunque no pueden realmente entender la grandeza de su Dios, a su manera rindan sus alabanzas.  Como los p‡jaros cantando muy de ma–ana.

 

Pero los santos, (y cuando la Biblia habla de santos est‡ halando de todos los redimidos en Cristo), pero los santos bendigan a Dios, dando las gracias.

 

Y si tienen un poquito de amor por su Dios y por su pr—ximo, van a hablar con otros sobre las grandezas de Dios.

 

Es normal para los hermanos hablar con otros sobre las grandezas de Dios, pero por la gran opresi—n demon’aca, no se hacen tanto en nuestros tiempos.

 

Muchos hermanos en nuestros tiempos, por la influencia del mundo, por la dominaci—n de su carne, por las amenazas del diablo, se que quedan en silencio, poco a poco perdiendo las oportunidades valiosas.

 

13) Tu reino es reino de todos los siglos, y tu se–or’o en todas las generaciones.

 

Muchos gobiernos, muchos grandes imperios se levantan y se caigan en la historia del mundo.  Pero pasando los siglos, el reino de Cristo siempre est‡ aqu’.   A veces se crece r‡pidamente, a veces el progreso es lento.  Pero nadie puede acabar con nosotros, porque tenemos la promesa del rey.

 

Mateo 28:18-20 Y Jesœs se acerc— y les habl— diciendo: Toda

               potestad me es dada en el cielo y en la

               tierra.  Por tanto, id, y haced disc’pulos a

               todas las naciones, bautiz‡ndolos en el nombre

               del Padre, y del Hijo, y del Esp’ritu Santo;

               ense–‡ndoles que guarden todas las cosas que

               os he mandado; y he aqu’ yo estoy con vosotros

               todos los d’as, hasta el fin del mundo. AmŽn.

Hay culturas que pueden abandonar la sabidur’a de la palabra de Dios, como estamos viendo ya en Europa, pero est‡n entrando en tantos problemas, problemas profundos, que solamente es un asunto de tiempo, hasta que se arrepientan de una vez, o se que se caigan en su ruina total.

 

14) Sostiene Jehov‡ a todos los que caen, y levanta a todos los oprimidos.

 

Hay muchos hermanos, que por el descuido de su vida espiritual se caigan, horriblemente.  Noe, el justo se termin— emborrachando se.  JosŽ en Egipto juro en el nombre del Fara—n.

 

GŽnesis 42:15  En esto serŽis probados: Vive Fara—n, que no

saldrŽis de aqu’, sino cuando vuestro hermano menor viniere aqu’.

 

MoisŽs se enojo, perdiendo la paciencia.  David se ca’a en el adulterio, y grandes abusos de poder, matando a Urias.  Salom—n levantaba templos para ’dolos, y Pedro negaba a su Se–or.

 

En todos esto casos Dios levantaba al ca’do.

 

Proverbios 24:16     Porque siete veces cae el justo, y vuelve

                     a levantarse; Mas los imp’os caer‡n en el

                     mal.

 

Y los que han ca’do,  miserablemente, glorifican a Dios por estar otra vez recibido como el hijo prodigo.

 

15-16) Los ojos de todos esperan en ti, y tœ les das su comida a su tiempo.  Abres tu mano, y colmas de bendici—n a todo ser viviente.

 

Aun en lo profundo del mar, los animales reciban su alimentaci—n, algunos viviendo poco tiempo, otros viviendo mas.  Pero Dios puede asegurar que tienen todo lo que necesitan.

 

Mateo 6:26 Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni

siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ÀNo valŽis vosotros mucho m‡s que ellas?

 

17) Justo es Jehov‡ en todos sus caminos, y misericordioso en todas sus obras.

Dios es cien por ciento justo.  Ni un pecado escapar‡ con impunidad.  O el pecador redimido en Cristo sabr‡ que su pecado fue castigado en la cruz, o el malvado pagar‡ para siempre en las llamas del infierno, mordiendo su lengua por el dolor.

 

Apocalipsis 16:10    El quinto ‡ngel derram— su copa sobre el

trono de la bestia; y su reino se cubri— de tinieblas, y mord’an de dolor sus lenguas.

 

Para los creyentes, la misericordia ser‡ evidente, para los no arrepentidos, la justicia estar‡ estricta y adecuada.

 

La impunidad no existe, en el universo creado por Dios.

 

Por esto, nuestro Dios est‡ bien digno de alabanza.

 

18-19) Cercano est‡ Jehov‡ a todos los que le invocan, a todos los que le invocan de veras.  Cumplir‡ el deseo de los que le temen; oir‡ asimismo el clamor de ellos, y los salvar‡.

 

Esto est‡ hablando de la manera en que Dios est‡ contestando las oraciones de millones de creyente alrededor del mundo.  Los que han caminado con el Se–or por mucho tiempo, saben que esto es cierto.

 

Por esto los Cristianos poderosos siempre pasan tiempo cada d’a orando.  Ni van a salir de la casa antes de orar, y vestir se de la armadura de Dios.

 

20) Jehov‡ guarda a todos los que le aman, mas destruir‡ a todos los imp’os.

 

Esto confirma que hay dos grupos en el mundo.  Como hemos visto desde el primer salmo.  Un grupo puede amar la palabra de Dios, y vivir meditando en ella.

 

El otro grupo o va a burlar de la palabra, o si no puede por su situaci—n social o familial, vivir‡ en la indiferencia de ella.

 

21) La alabanza de Jehov‡ proclamar‡ mi boca;

Y todos bendigan su santo nombre eternamente y para siempre.

 

 

 

David estaba muy contento con su Dios.  Su vida no era siempre f‡cil, tenia sus temporadas dif’ciles.  Pero mas tarde en su vida, entend’a que todo pasaba para su bien.

 

=========================== Aplicaci—n ======================

 

Bueno, hay muchas aplicaciones que se pudiera hacer de este salmo pero solamente voy a tomar el tiempo para una.

 

La persona que vive alabando a su Dios, vivir‡ como una persona contenta. 

 

Existe una trampa que el diablo siempre nos est‡ ofreciendo, y esto es la tentaci—n de jugar el papel de la victima.

 

Lucas 10:38-42 Aconteci— que yendo de camino, entr— en una

               aldea; y una mujer llamada Marta le recibi— en

               su casa.

 

Esta ten’a una hermana que se llamaba Mar’a, la cual, sent‡ndose a los pies de Jesœs, o’a su palabra.

 

Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acerc‡ndose, dijo: Se–or, Àno te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude.

 

Respondiendo Jesœs, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada est‡s con muchas cosas.

 

Pero s—lo una cosa es necesaria; y Mar’a ha escogido la buena parte, la cual no le ser‡

quitada.

 

Cristo no te va a ayudar, si insistes en jugar el papel de la victima.  Nosotros somos mas que vencedores.  Las dificultades vienen, y aprendemos a enfrentar las con valor.

 

Pero los que vivan alabando a su Dios siempre, dando gracias, jam‡s van a caer en esa trampa. 

 

Si esto es tu deseo, vivir como una persona contenta con tu Dios, siempre maravillada con su grandeza, siempre aprendiendo cosas nuevas sobre su excelencia, puedes pasar en un momento, y querremos orar para ti.

 

Vamos a Orar