11 de noviembre de 2016

 

Hay Que Confiar

Salmos 131:1-3

 

Salmos 131:1-3

 

En diferentes ocasiones, David estaba acusado de ser una persona trepadora, y lleno de soberbia.

 

Una vez cuando David estaba mandado al campo de la batalla con los filisteos, solamente obedeciendo a su padre, estaba acusado de la soberbia por su hermano mayor.

 

1 Samuel 17:26-28    Entonces habló David a los que estaban

junto a él, diciendo: ¿Qué harán al hombre que venciere a este filisteo, y quitare el oprobio de Israel? Porque ¿quién es este filisteo incircunciso, para que provoque a los escuadrones del Dios viviente?

 

Y el pueblo le respondió las mismas palabras, diciendo: Así se hará al hombre que le venciere.

 

Y oyéndole hablar Eliab su hermano mayor con aquellos hombres, se encendió en ira contra David y dijo: ¿Para qué has descendido acá? ¿y a quién has dejado aquellas pocas ovejas en el desierto? Yo conozco tu soberbia y la malicia de tu corazón, que para ver la batalla has venido.

 

El hermano mayor malentendió los celos que David tenia para su Dios y su reino, y a veces David trató de defender se, explicando que no era realmente un hombre de gran orgullo.

 

Y el salmo de hoy es como parte de su defensa.  La que hizo delante de su Dios en canción.

 

1) Señor, mi corazón no es orgulloso; mis ojos no son altivos.  No me intereso en cuestiones demasiado grandes

o impresionantes que no puedo asimilar.

 

Actualmente David, con todo su poder era un hombre sencillo.

Esto fue evidente en varias ocasiones.

 

Cuando Saúl ofreció a David su hija en casamiento, aunque era una trampa, David casi no pudo creer lo.

 

1 Samuel 18:17-18    Entonces dijo Saúl a David: He aquí, yo

te daré Merab mi hija mayor por mujer, con tal que me seas hombre valiente, y pelees las batallas de Jehová. Mas Saúl decía: No será mi mano contra él, sino que será contra él la mano de los filisteos.

 

Pero David respondió a Saúl: ¿Quién soy yo, o qué es mi vida, o la familia de mi padre en Israel, para que yo sea yerno del rey?

 

David no buscaba posiciones muy altas, estaba contento como pastor de ovejas.   David no estaba elevando a si mismo, sino que Dios lo elevó.

 

Cuando Dios entró en pacto eterno con David, prometiendo que iba a tener un hijo siempre sobre el trono, David contestó con las mismas palabras.

 

1 Crónicas 17:16-17  Y entró el rey David y estuvo delante de

Jehová, y dijo: Jehová Dios, ¿quién soy yo, y cuál es mi casa, para que me hayas traído hasta este lugar?

 

Y aun esto, oh Dios, te ha parecido poco, pues que has hablado de la casa de tu siervo para tiempo más lejano, y me has mirado como a un hombre excelente, oh Jehová Dios.

 

Para David todo esto parecía imposible, porque en su corazón, era humilde.

 

Así que el primer versículo aquí es como una defensa.

 

1) Señor, mi corazón no es orgulloso; mis ojos no son altivos.  No me intereso en cuestiones demasiado grandes

o impresionantes que no puedo asimilar.

 

Cuando dice “mis ojos no son altivos” es que David no miraba abajo a otros. 

Sino que se vio a todos como personas creadas en el imagen de Dios, y por lo tanto llenos de valor y de dignidad.  Esto fue comprobado en la manera en que se trataba el hijo de Jonatan.

 

Bueno, su esposa que era hija de Saúl, si sabia como mirar a otros con ojos altivos.

 

2 Samuel 6:20-23     Volvió luego David para bendecir su casa;

y saliendo Mical a recibir a David, dijo: !!Cuán honrado ha quedado hoy el rey de Israel, descubriéndose hoy delante de las criadas de sus siervos, como se descubre sin decoro un cualquiera!

 

Entonces David respondió a Mical: Fue delante de Jehová, quien me eligió en preferencia a tu padre y a toda tu casa, para constituirme por príncipe sobre el pueblo de Jehová, sobre Israel. Por tanto, danzaré delante de Jehová.

 

Y aun me haré más vil que esta vez, y seré bajo a tus ojos; pero seré honrado delante de las criadas de quienes has hablado.  Y Mical hija de Saúl nunca tuvo hijos hasta el día de su muerte.

 

Cuando David quitaba su ropa royal, Mical, la hija de Saúl estaba ofendida, porque ella estaba acostumbrada a pensar que era superior a los demás, y no le gustó cuando David se portaba como una persona normal.

 

Pero para Dios el orgullo, la soberbia es repugnante, y por esto se mencionan que ella jamás tuvo hijos.  No era una coincidencia.

 

Pero hay aun mas en este primer verso.

 

1) Señor, mi corazón no es orgulloso; mis ojos no son altivos.  No me intereso en cuestiones demasiado grandes

o impresionantes que no puedo asimilar.

 

David no trataba de entender cosas muy complicadas o inescrutables.   Porque esto tambien es una forma de soberbia.  Hay gente que siempre quieren pedir ¿por que?

 

Uno pudiera preguntar “Porque Dios llevó a la hermana María Marta, cuando era tan joven, y tenia hijos”.

Otros pudieron preguntar “Porque precisamente yo, tengo que sufrir de repente con problemas graves de salud”.

 

O “¿Porque yo tengo que luchar con un hijo, o un joven que es rebelde y no quiere obedecer?”

 

O se pudiera preguntar ¿por que tenían que pasar ciertos acontecimientos políticos?”, como muchos están considerando ahora.

 

Todas estas cosas son complicadas, dolorosas y tal vez inescrutables para nosotros.  Por esto Moisés nos dio un gran versículo para ayudarnos a vivir como contentos.

 

Deuteronomio 29:29   Las cosas secretas pertenecen a Jehová

nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley.

 

Dios nos ha revelado mucho, pero no nos ha revelado todo.  Y lo que no nos ha revelado, realmente no es asunto nuestro.

 

Nos ha dado grandes evidencias de su amor primero en la muerte de Cristo en la cruz por nosotros, pagando por nuestros pecados, y segundo dándonos la fe necesaria para creer todo esto, aplicando lo a nuestras almas.

 

Y a veces esto tiene que ser suficiente para nosotros.

 

Esto era un gran tema en el libro de Job.   Aunque era un hombre justo, muy honorable, Dios permitió ciertos sufrimientos en su vida.

 

Leyendo todo el libro se ve que Job realmente querría pedir a Dios, en una entrevista, ¿qué estaba pasando?, ¿por qué?, ¿por qué?, ¿por que?  pausa

 

En realidad Dios jamás contestaba estas preguntas.  Dios es bueno, y digno de nuestra confianza, no está bajo obligación de dar cuentas a nadie.  pausa

 

A veces pedir mucho es una forma de orgullos.  pausa

 

Un pastor confesaba que estaba bien enojado con su Dios porque viajando a una conferencia, el aerolínea perdió su maleta. 

 

Sintiendo mal, lleno de resentimientos en contra de Dios, que está en control de todas las cosas, llamó a su esposa para compartir su berrinche.

 

Ella dijo, Ah! querido gracias a Dios que llamasteis, porque acabamos de recibir una llamada de tu medico y tu espalda está muy frágil, según los rayos x, y en el momento que te levantes algo pesado, vas a destruir tu disco.   pausa

 

El pastor confesó a toda la congregación, a todo el mundo actualmente porque está publicado.  Se confesó que estaba furioso con su Dios, mientras su Dios estaba protegiendo le.

 

Esto es lo que pasa muchas veces con nosotros cuando quejamos en nuestro orgullo.  Hay que confiar.

 

2) En cambio, me he calmado y aquietado, como un niño destetado que ya no llora por la leche de su madre.  Sí, tal como un niño destetado es mi alma en mi interior.

 

Esto ahora está hablando de la madurez espiritual.  Para un bebé recién nacido, es normal llorar mucho, gritar, manipular, ir de una berrinche a otra.

 

Pero con la madurez, se espera una calma, menos ruido, menos quejas, menos gritos.

 

2) En cambio, me he calmado y aquietado, como un niño destetado que ya no llora por la leche de su madre.  Sí, tal como un niño destetado es mi alma en mi interior.

 

Uno niño un poco maduro, es un excelente candidato para el

reino de Dios, porque sabe como confiar en sus padres.

 

Mateo 18:1-3   En aquel tiempo los discípulos vinieron a

Jesús, diciendo: ¿Quién es el mayor en el reino de los cielos?  Y llamando Jesús a un niño, lo puso en medio de ellos, y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.

 

El ejemplo es de un niño que puede confiar, y esto es el punto.  Hay que confiar.  Dios es digno de nuestra confianza y Dios no ha perdido el control de su planeta.

 

 

 

Filipenses 4:6-7     Por nada estéis afanosos, sino sean

conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.

 

Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

 

Tambien Cristo condenó la tendencia de adelantar maldades en el futuro, llenando nos con angustias.

 

Mateo 6:33-34  Mas buscad primeramente el reino de Dios y su

justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.  Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.

 

Hay muchas distracciones que pueden quitar nuestra atención de la cosa que es mas importante, el reino de Dios y su justicia. 

 

Si uno tiene comida, techo, y una cama para hoy, esto debe de ser suficiente.  Si Dios ha cuidado bien de ti en el pasado, seguramente será igualmente bondadoso contigo, su hijo, en el futuro.

 

Tenemos que caminar por la fe, y no por la vista.  Hay que confiar.

 

3) Oh Israel, pon tu esperanza en el Señor, ahora y siempre.

En domingo yo predicaba en contra de la confianza en el gobierno, en los príncipes, en los políticos, y jeremías dijo que esto era una maldición.

 

Jeremías 17:5  Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que

confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová.

 

Tambien en el Salmo que viene mas tarde…

Salmos 146:3-5 No confiéis en los príncipes, Ni en hijo de

hombre, porque no hay en él salvación.  Pues sale su aliento, y vuelve a la tierra; En ese mismo día perecen sus pensamientos.  Bienaventurado aquel cuyo ayudador es el Dios de Jacob, Cuya esperanza está en Jehová su Dios.

En muchos casos lo que pasa en los gobiernos del mundo es demasiado complicado, inescrutable para nuestro entendimiento.

 

1) Señor, mi corazón no es orgulloso; mis ojos no son altivos.  No me intereso en cuestiones demasiado grandes

o impresionantes que no puedo asimilar.

 

Viviendo un día a la vez, disfrutando la familia, las amistadas y las demás bendiciones debe de ser suficiente para todos nosotros.  Hay que confiar.

 

-------------------------- Doctrina -----------------------*

 

El salmo nos enseña como vivir como contentos, pase lo que pase en nuestro alrededor.

 

San Pablo sufría muchas persecuciones, pero su vida era gozosa, porque aprendió algo.

 

Una vez estaba pidiendo ayuda para otra iglesia, no para él mismo, pero usaba la ocasión para enseñar.

 

Filipenses 4:11-13   No lo digo porque tenga escasez, pues he

aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación.

 

Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.

 

Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

 

Esa forma de madurez no es natural, ni para los hermanos, porque aun nosotros tenemos mucho orgullo reservado en nuestra carne. 

 

Pero con el aprendizaje y con la oración y la experiencia, nosotros podemos llegar a ese nivel de madures, y de contentamiento.

 

Hay que confiar, pero primeramente tenemos que aprender a confiar en todo.

 

 

 

 

------------------------- Conclusión -----------------------*

 

Ahora es el momento de la madurez, y de la humildad, no es el momento de las berrinches.

 

Tenemos que creer que todo lo que pasa, está pasando para nuestro bien.

 

Romanos 8:28-30 Y sabemos que a los que aman a Dios,

todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.

 

Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.

 

Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.

 

Si tu estás teniendo problemas, tratando de asimilar todo lo que está pasando en un mundo que parece cada vez mas loco, tal vez es tiempo de simplemente dejar todo, en las manos de tu Dios.

 

Si quieres entrar en la serenidad, alcanzando la paz de Cristo, que pase todo entendimiento, puedes pasar en unos momentos y queremos orar para ti.

 

En fin, hay que confiar.

 

Vamos a Orar