3 de abril de 2015
“Quitando La
Maldición”
1 Corintios
1:18-24
Introducción
Lo que estamos celebrando en este fin de semana, es algo que contiene sabiduría
infinita. La muerte de Cristo,
aunque parece absurdo a los incrédulos, es algo que los hombres, y hasta los
ángeles van a estudiar para toda la eternidad.
1 Corintios 1:18-24 Porque
la palabra de la cruz es locura
a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros,
es poder de Dios.
Existe un mensaje, profundo y poderoso que sale de la muerte de
Cristo.
19 Pues está escrito:
Destruiré la sabiduría de los sabios,
Y desecharé el entendimiento de los entendidos.
20 ¿Dónde está el sabio? ¿Dónde está el escriba? ¿Dónde está el
disputador de este siglo? ¿No ha enloquecido Dios la sabiduría del mundo?
Dios no solamente está revelando su propia sabiduría, pero al mismo
tiempo está borrando completamente la sabiduría de los seres humanos que
rechazan a Cristo.
21 Pues ya que en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios
mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la
predicación.
Muchos filósofos y hombre de conocimiento, han tratado de decir algo
sobre la naturaleza de Dios, del propósito de la vida, de los problemas del
hombre. Pero Dios dice aquí
que estos, sin la palabra, solamente han producido la pura vanidad.
22 Porque los judíos piden señales, y los griegos buscan sabiduría;
pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos
ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura; mas para los llamados, así judíos como griegos, Cristo
poder de Dios, y sabiduría de Dios.
Hay gran sabiduría de Dios, revelado en la muerte de Cristo. Y los mas sabios del mundo, si rechazan
la palabra, se quedan perplejos, perdidos e incapaz de entender qué está
pasando en sus propias vidas. Nada
tiene sentido.
Pero una vez viendo el plan de Dios, es tan rico, tan profundo que se
pudiera pasar toda la eternidad descubriendo lo.
Vamos a explorar, brevemente, algo de la mente de Dios.
Todos los que conocen algo del Dios de la Biblia, saben que nuestro
Dios es un Dios de amor, de compasión, y de perdón.
Pero existan otros aspectos de su naturaleza que son bien evidentes,
pero son dimensiones de que no se habla tanto.
Por ejemplo muy temprano en la Biblia se ve la manera en que Dios
respondió a la serpiente por su participación en la caída del hombre.
Génesis 3:14 Y Jehová
Dios dijo a la serpiente: Por
cuanto esto hiciste, maldita
serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu
pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida.
El gran Dios del amor, cuando sea adecuadamente provocado, tiene la
capacidad de maldecir. Aparte de su amor y su misericordia, es
un Dios de justicia. Un poco mas
tarde toda la tierra recibió una condena semejante.
Génesis 3:17-19 Y al hombre dijo:
Por cuanto obedeciste
a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No
comerás de él; maldita será la tierra
por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida.
18 Espinos y cardos te producirá, y comerás plantas del campo.
19 Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la
tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.
La tierra misma recibió una maldición,
y por la gran rebelión de Adán y Eva, la raza human, la raza maldecida, recibió
la maldición de la muerte. pausa
Pero esto no fue todo, en el capitulo siguiente, otro ser humano
recibió el mismo.
Génesis 4:9-11 Y Jehová dijo a
Caín: ¿Dónde está Abel tu
hermano? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guarda de mi hermano?
Y él le dijo: ¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama
a mí desde la tierra.
Ahora, pues, maldito seas tú
de la tierra, que abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu
hermano.
¡Imagínate! No es posible jamás escuchar algo tan terrible, que
palabras pronunciadas del Dios omnipotente, diciendo a Caín que era maldecido por el asesino de su hermano.
No es para menos que Caín respondió diciendo…
Génesis 4:13 Grande es mi castigo para ser soportado.
pausa
Pero aun esto no fue todo.
Mas tarde antes de entrar en la tierra prometida, el pueblo de Dios
tenia que confirmar su pacto de manera muy definitiva.
Deuteronomio 27:11-26
11 Y
mandó Moisés al pueblo en aquel día, diciendo:
12 Cuando hayas pasado el Jordán, éstos estarán sobre el monte Gerizim
para bendecir al pueblo: Simeón, Leví, Judá, Isacar, José y Benjamín.
13 Y éstos estarán sobre el monte Ebal para pronunciar la maldición: Rubén, Gad, Aser, Zabulón,
Dan y Neftalí.
14 Y hablarán los levitas, y dirán a todo varón de Israel en alta voz:
15 Maldito el hombre que
hiciere escultura o imagen de fundición, abominación a Jehová, obra de mano de
artífice, y la pusiere en oculto. Y todo el pueblo responderá y dirá: Amén.
16 Maldito el que
deshonrare a su padre o a su madre. Y dirá todo el pueblo: Amén.
17 Maldito el que redujere
el límite de su prójimo. Y dirá todo el pueblo: Amén.
18 Maldito el que hiciere
errar al ciego en el camino. Y dirá todo el pueblo: Amén.
19 Maldito el que
pervirtiere el derecho del extranjero, del huérfano y de la viuda. Y dirá todo
el pueblo: Amén.
20 Maldito el que se
acostare con la mujer de su padre, por cuanto descubrió el regazo de su padre.
Y dirá todo el pueblo: Amén.
21 Maldito el que se ayuntare
con cualquier bestia. Y dirá todo el pueblo: Amén.
22 Maldito el que se
acostare con su hermana, hija de su padre, o hija de su madre. Y dirá todo el
pueblo: Amén.
23 Maldito el que se
acostare con su suegra. Y dirá todo el pueblo: Amén.
24 Maldito el que hiriere a
su prójimo ocultamente. Y dirá todo el pueblo: Amén.
25 Maldito el que recibiere
soborno para quitar la vida al inocente. Y dirá todo el pueblo: Amén.
26 Maldito el que no
confirmare las palabras de esta ley para hacerlas. Y dirá todo el pueblo: Amén.
Es muy claro, que el Dios amoroso, el Dios misericordioso, el Dios de
todo amor, también tiene la capacidad de maldecir. Y entendiendo esto, podemos ver,
Bíblicamente porque el mundo tiene tantos problemas. Porque la vida, es a veces tan difícil.
Y es algo que se encuentre en muchas partes de las escrituras.
Mira por ejemplo al ultimo verso del testamento antiguo.
Malaquías 4:6 El hará
volver el corazón de los padres
hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea
que yo venga y hiera la tierra con maldición.
Tal vez alguien está pensando, “Está bien, pero todo estos son textos
del testamento antiguo, y nosotros ya estamos viviendo en otra época ahora.”
Pero mira como Cristo mismo habla del gran día de separación en el
libro de Mateo.
Mateo 25:41 Entonces
dirá también a los de la izquierda:
Apartaos de mí, malditos,
al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.
¿Como es posible que el gran salvador del amor pudiera también hablar
así? pausa
Es que Cristo sabia que la raza humana, y la tierra completa estaba
bajo una maldición por el
pecado. Unos teólogos han dicho a
través de los siglos que la raza humana, toda la raza humana es una raza
maldecida. pausa
Pero Cristo vino, para morir, y en el proceso quitar la maldición.
Si los seres humanos, o hasta los ángeles entendieron la magnitud de
la maldición, y el deseo que Dios
tenia de quitar la, nadie pudiera
inventar ni imaginar lo que pasó.
Nadie pudiera imaginar que Dios iba a venir, en carne, viviendo en una
condición débil y humilde para quitar esta horrible maldición de nosotros.
Pero cuando Cristo murió, las señales de la maldición estaban en todos lados.
Antes que nada era evidente en la manera en que se murió, colgado en
una cruz.
En la cultura de los judíos, la cruz no era la manera normal de matar
a un criminal, sino que se usaban piedras. Pero sí, la ley dice algo de otras maneras de implementar la
pena de la muerte.
Deuteronomio 21:22-23 Si
alguno hubiere cometido algún
crimen digno de muerte, y lo hiciereis morir, y lo colgareis en un
madero, no dejaréis que su cuerpo pase la noche sobre el madero; sin falta lo
enterrarás el mismo día, porque
maldito por Dios es el colgado; y no contaminarás tu tierra que Jehová
tu Dios te da por heredad.
Cristo tenia que estar colgado, porque esta manara de morir, está bajo
maldición. En todo esto, Cristo quitaba la maldición de los que iban a
creer en él. Por esto, Dios en su
sabiduría, controlaba cada detalle de la muerte de su hijo.
Desde la cruz, Cristo clamaba, como se dicen en el salmo 22, Dios mío,
Dios mío, ¿por qué me has desamparado?
Mateo 27:46 Cerca
de la hora novena, Jesús clamó a gran
voz, diciendo: Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío,
¿por qué me has desamparado?
Cristo, llevando tu maldición,
y la mía, estaba separado de la presencia de su Padre. Y esto corresponde a la expulsión de Adán
y Eva del paraíso.
Génesis 3:22-24 Y dijo Jehová
Dios: He aquí el hombre
es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que
no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para
siempre.
Y lo sacó Jehová del huerto del Edén, para que labrase la tierra de
que fue tomado.
24 Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén
querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para
guardar el camino del árbol de la vida.
Tu e yo fuimos maldecidos
en nuestros primeros padres, y como todo hombre separados de la presencia de
Dios. Pero Cristo, en la cruz, nos
quitó esta maldita separación.
Cuando Adán pecó, lanzando la maldición sobre la tierra, espinos y
cardos aparecieron para molestar a todos los que trabajaban en los jardines o en
las granjas.
Génesis 3:18 Espinos
y cardos te producirá,
y comerás plantas del campo.
Espinos y cardos son gran parte de la maldición, y por esto Cristo llevó una corona de espinas, para ti,
para quitar te la maldición.
Juan 19:1-3 Así
que, entonces tomó Pilato a Jesús, y le
azotó. Y los soldados
entretejieron una corona de espinas, y la pusieron sobre su cabeza, y le
vistieron con un manto de púrpura; y le decían: !!Salve, Rey de los judíos! y
le daban de bofetadas.
Cuando Adán pecó, estaba lleno de vergüenza porque estaba desnudo.
Génesis 3:9-11 Mas Jehová Dios
llamó al hombre, y le dijo:
¿Dónde estás tú? Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo,
porque estaba desnudo; y me escondí.
11 Y Dios le dijo: ¿Quién te enseñó que estabas desnudo? ¿Has
comido del árbol de que yo te mandé no comieses?
Adán se sentía la vergüenza porque ya estaba empezando a conocer la maldición.
De la misma manera, Cristo Jesús estaba desnudo en la cruz.
Algunos crean que estaba parcialmente desnudo, otros crean que era
totalmente desnudo. En cualquier
caso estaba sufriendo la vergüenza, quitando de ti para siempre la maldición.
Cuando la economía está mala, sabemos que es difícil trabajar y tener
recursos adecuados para pagar todas nuestras deudas.
Y a veces el trabajo mismo es muy duro, tan duro que nos hace sudar
debajo del sol. Y esto es parte de
la maldición.
Génesis 3:19 Con el
sudor de tu rostro comerás el pan
hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues
polvo eres, y al polvo volverás.
Y por supuesto Cristo sufrió esto también, sudando gotas grandes de
sangre, agonizando en oración la noche anterior.
Todo esto Cristo hizo para quitar la maldición de los que iban a poner su fe en él.
Isaías 53:6 Todos
nosotros nos descarriamos como ovejas,
cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de
todos nosotros.
El pecado, por causa de la ley, nos ha puesto bajo la maldición. Pero la muerte de Cristo tiene la capacidad de quitar la
maldición de cualquier persona
redimida en
su sangre.
Por esto, se hablan tanto de la muerte de Cristo en todo el nuevo
testamento. El mensaje de que
cruz, es sumamente poderoso.
1 Corintios 2:2 Pues me propuse
no saber entre vosotros
cosa alguna sino a Jesucristo, y a éste crucificado.
Apocalipsis 5:12 El
Cordero que fue inmolado es digno de
tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la
gloria y la alabanza.
En este evento que celebramos hoy día hay sabiduría ilimitada, que no
se puede descubrir en un solo mensaje, sino que por toda la eternidad, estarás descubriendo
mas y mas de lo que Dios organizó alrededor de esta muerte cruel y sangrienta.
Cuando David enfrentó a Goliat, no vino con las armas de guerra, que
se esperaban, sino que vino como un joven, con unas piedras y su honda. Y así su victoria era mas
gloriosa. Ni tenia espada. Pero se cortó la cabeza de Goliat con
su propia espada.
De la misma manera, Cristo vino como un pobre, una persona débil y sin
fuerzas, para morir. Y en su
muerte, tomó la arma del diablo, su cruz, y con la misma cruz, metafóricamente
hablando, se le quitó la cabeza del diablo.
1 Juan 3:8 El que practica el
pecado es del diablo;
porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo
de Dios, para deshacer las obras del diablo.
Era como Sansón, que no necesitaba armas normales, sino gloriosamente
mató a mil personas con la quijada de un asno. Dios controló la vida de Sansón,
y la vida de David para enseñar nos esto.
Y es infinitamente glorioso.
Había una maldición aun mas
espantosa que vino con la caída de Adán, y esto era la maldición de la muerte.
Génesis 3:19 Con el
sudor de tu rostro comerás el pan
hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás
La muerte no era parte del paraíso, sino que se entró por la maldición. Y la muerte es espantoso en el extremo, porque la Biblia
también habla de la muerte segunda.
Apocalipsis 21:8 Pero
los cobardes e incrédulos, los
abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y
todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre,
que es la muerte segunda.
Apocalipsis 20:14 Y
la muerte y el Hades fueron lanzados
al lago de fuego. Esta es la muerte
segunda.
La muerte segunda es la
medición en todo su poder y todo su horror, y viendo lo que hemos escapado,
estaremos llenos de gratitud, y adoración para toda la eternidad.
El Padre, en su sabiduría infinita, quiso ver a su hijo aplastado,
porque su amor para ti, era tan grande, que no quiso verte, sufriendo bajo tu maldición.
Isaías 53:10 Con todo
eso, Jehová quiso quebrantarlo,
sujetándole a padecimiento. Cuando haya puesto su vida en expiación
por el pecado, verá linaje, vivirá por largos días, y la voluntad de Jehová
será en su mano prosperada.
Cristo va a prosperar mas y mas, quitando
la maldición.
Entendiendo algo de la maldición,
la maldición justa y recta que el
hombre ha ganado por su pecado, se puede sentir algo, de la importancia de la
muerte de Cristo que celebramos hoy día.
------------------------- Conclusión ----------------------
Preparando nos para la santa cena en dos días, debemos de meditar en
los beneficios, que Cristo nos ha comprado, quitando la maldición de nosotros.
1) La Paz con Dios
Romanos 5:1 Justificados,
pues, por la fe, tenemos paz
para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.
Para los que sigan bajo la maldición,
no tienen paz con Dios. En
realidad Dios es como su enemigo espantoso, un enemigo que no pudiera ser mas
formidable. Pero nosotros ya
tenemos una paz eterna.
2) Propósito
Mientras vivimos en este mundo, nuestra vida tiene un gran propósito, y
todo lo que hacemos es importante, avanzando semana tras semana el reino de
Cristo.
Pero tenemos que entender que viviendo debajo de la maldición hay mucha gente que vivan
vidas sin propósito alguno.
En el 24 de marzo, hace unas semanas, un copiloto Alemán Andreas
Lubitz, hizo estrellar un gran avión en los Alpes Franceses, porque su vida ya
no tenia sentido.
Dijo a una de sus novias que por su enfermedad, no pudo jamás alcanzar
su sueño de trabajar como un piloto de larga distancia para Lufthansa.
Y no solamente se quitó su propia vida, sino mató a ciento cincuenta
personas inocentes. Y todos en
Alemania estaban preguntando “¿por qué, por que?”.
Pero no es muy complicado, su vida no tenia ni propósito ni sentido,
con sus enfermedades, y los que aun están bajo la maldición, están capaz de todo.
Hay que dar gracias a Dios que tu vida tiene propósito.
3) Futuro
Los que conocen a Cristo siempre tienen un futuro, pasa lo que pasa
con las enfermedades o aun la muerte, tenemos un futuro glorioso con nuestro
Dios. Pero imagínate el futuro
para los que aun vivan, bajo la maldición.
4) La protección y la provisión
Dios nos ha prometido a estar con nosotros, pasa lo que pasa, toda la
vida, previendo nuestras necesidades.
Y normalmente nos da mas que las necesidades básicas.
Hebreos 13:5 Sean
vuestras costumbres sin avaricia,
contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé,
ni te dejaré.
Pero los que aun están bajo la maldición
no tienen ninguna promesa ni de provisión ni de protección. Están como Adán y Eva expulsados del
huerto. O como Cristo cuando gritó
en tu lugar, ¿Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?
Si Dios te ha dado a Cristo, Dios te ha dado todo.
Romanos 8:32 El que
no escatimó ni a su propio Hijo,
sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con
él todas las cosas?
Amen
Vamos
a orar.